La estrella del penal económico
Víctor de Aldama ha escogido como defensa al abogado estrella de los asuntos penales económicos, el madrileño José Antonio Choclán. Exmagistrado de la Audiencia Nacional, donde fue ponente de la sentencia del caso Banesto que condenó a 10 años de prisión a Mario Conde, hace dos décadas fundó su propio despacho, desde el que ha defendido a políticos como la exalcaldesa valenciana fallecida, Rita Barberá, o implicados en las principales causas de corrupción recientes, como el líder de Gürtel, Francisco Correa, o el empresario que tiró de la manta en el caso Púnica, David Marjaliza. En la reciente causa ante la Justicia británica donde Corinna Larsen acusaba de hostigamiento a Juan Carlos I, fue el encargado, junto con Bernardo del Rosal, de explicar a los despachos británicos el sentido de la inviolabilidad real en la ley española. Él, a petición de los defensores de la empresaria alemana.
Entre sus galácticos defendidos, a quienes el Ministerio de Hacienda pisaba los talones con peticiones de prisión, también se encuentran el entrenador José Mourinho y el futbolista Cristiano Ronaldo. Por cómo se resolvieron las causas contra sus clientes más afamados, Choclán tiene fama de letrado de las conformidades con la Fiscalía, aunque realmente los acuerdos con el Ministerio Público suponen un 10% de las causas que ha llevado. Quienes llaman a su puerta saben que se tienen que rascar el bolsillo. Sólo unos pocos pueden pagar sus tarifas, que él mismo defiende como proporcionales a su trabajo. Aunque, en este asunto, otros penalistas económicos cardan la lana.
Choclán cuenta con el respeto de los tribunales y también de sus colegas de profesión, que admiran su «tenacidad» y conocimiento del ámbito que maneja. Uno de sus ‘rivales’ consultados por ABC le considera ‘el Benjamin Brafman’ español: «Brillante, caro, defensor de personalidades en problemas... y duro en los juicios con sus argumentos». Sin embargo, hay una diferencia clave entre la «estrella del penal económico», como lo describen periodistas de tribunales, con el popular estadounidense, defensor de Dominique Strauss-Khan o Harvey Weinstein. Choclán nunca defendería a un violador.