Moody’s mejora sus perspectivas para España pero S&P percibe fragilidad política
La agencia de calificación crediticia Moody’s ha confirmado el ‘rating’ de España en ‘Baa1’ y ha mejorado la perspectiva de ‘estable’ a ‘positiva’ debido un «mayor equilibrio en el modelo de crecimiento del país». La agencia estadounidense cree que la economía española presenta un bajo apalancamiento del sector privado y un sector bancario «robusto», además de un superávit por cuenta corriente y un mercado laboral fortalecido en comparación con la última década debido a la «sólida gobernanza» y a «una «mayor eficacia de las políticas» para hacer frente a las fuentes de desequilibrios macroeconómicos.
En consecuencia, Moody’s considera que estas circunstancias podrían provocar un crecimiento mayor y con menos volatilidad del que se aprecia en la actualidad. La revisión de la calificación a España ha sido celebrada por el ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, que ha destacado en un mensaje a través de su cuenta de X que el hecho de que las agencias de calificación muestren su confianza en el modelo de crecimiento de la economía española «es un paso importante».
La agencia prevé que España registre un crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) real del 1,7% y del 1,8% en 2025. En cuanto a la inversión, Moody’s espera que tanto el gasto público como el privado se vean respaldados por los fondos de inversión de la Unión Europea que España tiene disponibles para los próximos años.
Apoyo heterogéneo
La calificación de Moody’s llegó pocas horas después de que S&P Global también mantuviera su nota para la economía española en ‘A/A1’ con perspectiva ‘estable’ pese a las «fragilidades políticas», con un Gobierno que depende «del apoyo de un grupo heterogéneo de partidos» lo que podría afectar a la aplicación de políticas.
Con todo, la agencia señala que la economía española «parece resistente» y espera que el PIB real «se expanda en 2,0% en promedio durante el período 2024-2027, frente al 1,2% en la eurozona».En este punto, S&P pone en valor los factores positivos de la economía española y destaca que «las exportaciones netas seguirán siendo clave», especialmente por los ingresos por turismo, que «mantuvieron a flote las exportaciones en 2023».