Σ Pese a que el PIB crece en España a ritmos del 3%, los sueldos están lejos del nivel de 2009 y las rentas bajas no ganan poder adquisitivo
La tarta del crecimiento económico sigue cogiendo forma y ganando tamaño en todo el mundo, pero las raciones no terminan de aumentar en todos los platos. Como alertaba esta semana el Foro de Davos, la situación se extiende a todos los rincones del planeta en un contexto de inevitable e imparable globalización. Y España no es ajena a este fenómeno de desigualdad. Gobierno y organismos internacionales coinciden en los buenos datos que arroja la economía española, que el año pasado creció un 3% y para este 2018 se espera que lo haga alrededor de un 2,4%.
Sin embargo, un informe de Oxfam Intermon, presentado también en el marco del evento suizo, señalaba que el 1% de la población española tiene la cuarta parte de la riqueza nacional, lo que convierte a nuestro país en el tercero más desigual de toda la Unión Europea, según el mencionado criterio.
La cuestión de fondo es, según el mencionado informe, la naturaleza eminentemente desigual de la recuperación económica, tanto desde el inicio de la crisis como desde el co- La policía suiza vigilaba la ciudad de Davos esta semana mienzo de la recuperación. Según el índice de Gini en términos de mercado, y antes de las transferencias sociales, la desigualdad de renta en nuestro país se mantiene prácticamente invariable desde el inicio de la recuperación en 2014, con un incremento acumulado de más de siete puntos desde el inicio de la crisis en 2008 y, después de las transferencias sociales los resultados no son mucho mejores.
Distribución de la riqueza por decil en España
Segundo cuatrimestre de 2017
La desigualdad de rentas en España se representa por la polarización entre las más altas y las más bajas, de modo que si se compara la relación entre el 10% de la población con más ingresos y el 40% de la población