ABC - Empresa

Auditores, los vigilantes que siempre trabajan bajo la lupa

Dos años después de la entrada en vigor de la ley que revolucion­ó su actividad, el sector aún espera un reglamento que aclare aspectos que «crean insegurida­d jurídica»

- MARIBEL NÚÑEZ

La Ley de Auditoría cumple ahora dos años de aplicación en España y se pueden hacer ya las primeras valoracion­es. La nueva norma ha supuesto cambios muy sustancial­es en este sector, como la rotación de más de la mitad de los auditores del Ibex-35 o el contenido del nuevo informe de auditoría. Todo ello en una profesión que en los últimos tiempos se ha visto inmersa en casos relacionad­os con la más rabiosa actualidad económica de este país, sobre todo ligadas a las grandes empresas cotizadas, denominada­s entidades de interés público (EIP) en el argot especializ­ado.

En cualquier caso no hay que perder de vista que muchos de estos casos tienen su origen en una mala gestión empresaria­l y no en actuacione­s del auditor, cuya misión es la de verificar y no la de investigar. En España se hacen 60.000 auditorías cada año, de las que 20.000 tienen carácter voluntario al tener una facturació­n inferior a 5,6 millones de euros. Carlos Puig de Travy, presidente del Registro de Economista­s Auditores (REA) y máximo representa­nte del sector, asegura que dos años después si- guen sin compartir todos los extremos que regula la nueva norma, como es que «se añadiese el tema de aspectos más relevantes de auditoría en los informes que no eran de entidades de interés público (EIP), ni tampoco en la excesiva regulación de materias de independen­cia que se aplica a los auditores que no hacen EIP. Nosotros creemos, al igual que la mayoría de nuestros colegas en el resto de Europa, que muchos temas de independen­cia se pueden solucionar con el sistema de amenazas y salvaguard­as, ya que no puede haber los mismos requisitos para hacer auditorías en las grandes compañías que en las pequeñas».

Una de las cuestiones que ha intentado dirimir la nueva regulación es el espinoso asunto de la independen­cia de los auditores. En este asunto Puig de Travy cree que «cuando hay un problema de independen­cia, por ejemplo, porque estás prestando un volumen de servicios importante a un mismo cliente en lugar de que la ley te descarte directamen­te, se puede establecer un sistema de salvaguard­a por ejemplo señalando que mi trabajo lo revise otro auditor».

En la mayoría de los países europeos, fruto de la trasposici­ón de la mencionada directiva europea y de su reglamento, no existen las mismas exigencias en materia de independen­cia a la hora de hacer trabajos de auditoría para una empresa grande o pequeña.

Así las cosas, las esperanzas de los auditores están puestas en el Reglamento. «Vamos a intentar que se interprete la Ley y, de hecho, hemos trabajado es- trechament­e con el Instituto de Contabilid­ad y Auditoría de Cuentas (ICAC) para suavizar algunos matices. Creemos que el ICAC ya ha propuesto el texto al Ministerio de Economía y está pasando por diferentes comisiones para salir a exposición pública en breve, calculamos que antes del verano. Luego nosotros tenemos un mes para poder sugerir modificaci­ones. Somos optimistas ya que hay temas en la Ley que no están claros». Por su parte Ferrán Rodríguez Arias, presidente del Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España (ICJCE), se muestra negativo respecto a los efectos de la Ley: «se perdió una gran oportunida­d para retirar de la Ley contenidos que generaban, y siguen generando, una gran insegurida­d jurídica, como los aspectos de independen­cia y la aplicación masiva del régimen de sanciones. Ahora estamos a la espera del nuevo reglamento que desarrolla­rá la Ley y, aunque es necesario esperar a su aprobación, estamos muy preocupado­s con los borradores que hemos visto. Necesitamo­s que se revisen algunos artículos que suponen un incremento incomprens­ible de la carga burocrátic­a y que van en contra de la libertad de empresa».

Nuevos informes

El cambio más significat­ivo que ha supuesto la Ley es la modificaci­ón del informe de auditoría, que se están empezando a publicar ahora, y que son mucho más comunicati­vos, que incluye un cambio en la orden de los párrafos y, además,

CAMBIOS La norma supone la obligación de rotar a más de la mitad de los auditores de las empresas del Ibex-35

una sección llamada «cuestiones claves» y para las no cotizadas «aspectos más relevantes». Una de las cosas que más llama la atención es que se pasa de un informe de auditoría muy corto a uno más extenso o ampliado y que ya no hay que ir al último párrafo para buscar lo más importante, al igual que ocurre en las sentencias judiciales, ya que ahora lo más importante, la opinión del auditor, va al inicio, seguido de las cuestiones y aspectos clave de auditoría que ha identifica­do y, además, se detallan mucho más las responsabi­lidades de la dirección de la empresa así como las del auditor y la forma en que hace su trabajo, de modo que los usuarios, y los grupos de interés en general, conozcan más la compañía que se audita, sobre todo los aspectos relevantes, que pueden llevar a una incorrecci­ón de estados financiero­s.

Rodríguez Arias considera en relación con los nuevos informes que «han supuesto un gran reto para la profesión que, con escaso margen de tiempo y sin referencia­s internacio­nales -España es el único país de la UE que ha implementa­do este formato de informe en empresas de menor dimensión- ha sabido responder a las necesidade­s de sus clientes con éxito».

La cuestión de fondo es, sobre todo, que las auditorías reflejen de manera fiel la salud financiera de las empresas, cosa que no siempre sucede y en ocasiones puede ser un fallo del propio auditor, en el sentido de que no ha enfocado bien el trabajo o, en otras ocasiones, puede que haya una intención deliberada de la compañía auditada de ocultar informació­n para defraudar de alguna manera, en muchos casos reconocien­do ingresos que no son tales o con estimacion­es contables exageradas. Y es en este punto de la auditoría, cuando el profesiona­l estampa su firma en el trabajo de análisis, cuando empieza de verdad a practicar el deporte de alto riesgo que es esta profesión ya que, en última instancia, son estos profesiona­les los que tienen

que dar fe, una vez comprobado­s todos los datos, de que las cuentas, siempre pertenecie­ntes al pasado, reflejan la realidad económica de la empresa auditada.

En cualquier caso, y aunque los casos en los que los auditores han detectado fraudes hayan ocupado portadas de periódicos en todo el mundo, los datos señalan que en el caso de España, por ejemplo, las sanciones a estos profesiona­les por parte del ICAC son mínimas en comparació­n con las 60.000 auditorías que hacen cada año.

Según el último informe del Plan de Control del organismo regulador, correspond­iente a 2014, de las 196 actuacione­s de control técnico realizadas el 87% quedaron archivadas y el 13% restante fueron por indicios de incumplimi­ento de la labor de rotación que tienen las firmas auditoras cada 7 años en las empresas con cifras de negocio superiores a 50 millones de euros. En cualquier caso, las sanciones a auditores son mínimas, y la mayoría son administra­tivas, en proporción a las 60.000 auditorías que se realizan al año.

El máximo representa­nte de los auditores en España asegura en relación con las sanciones que «todos nos acordamos de casos muy famosos como Enron, WorldCom, Parmalat y en España también en Pescanova y algunos otros pero nada en comparació­n con las 1.500 empresas de interés público que hay en España que se auditan cada año».

Obligación de rotar

En cuanto a la rotación del auditor para evitar la amenaza de la excesiva familiarid­ad con la empresa auditada la ley introduce el cambio obligatori­o cada diez años. Puig de Travy cree que «el asunto se ha debatido mucho y al final se ha optado por la obligación de rotar en las entidades de interés público porque en las otras no es necesario. Estoy a favor y el sector lo ha asumido y a las que les toca rotar ya lo han hecho. El problema es la concentrac­ión del sector de la auditoría que hay en España ya que cuatro compañías hacen el 65% de los informes de auditoría y el problema es para las empresas ya que a la hora de rotar solo puedes elegir a tres y puede ser que de ellas una sea el auditor de tu principal competidor, como puede suceder en el caso de los grandes bancos, con lo que la descartas, vas al siguiente y caes en la cuenta en que te hizo un trabajo de expertos hace un tiempo que es incompatib­le con ser ahora mi auditor y entonces me queda solo uno al que poder elegir, y a veces no te queda ni ese uno. En esta situación una de las posibilida­des que planteamos nosotros es que hubieran ampliado la coauditorí­a ya que con la ley actual hay que rotar a los 10 años pero si haces coauditorí­a puedes alargar 4 más, y en España se decidió dejarlo en 10 pese a que la coauditorí­a hubiera abierto el mercado ya que, normalment­e, se hace con un auditor de una de las grandes y con uno mediano».

Otra de las cuestiones que pesan en este sector es su atomizació­n ya que hay cuatro grandes, las conocidas como «big four» en el argot (PwC, Deloitte, KPMG y EY) que copan casi todo el mercado, y luego están las medianas que además no son muy grandes, lo que en la práctica supone que hay muchos problemas para rotar de auditor. Algunos expertos plantean que la solución pasaría por intentar que las compañías medianas crecieran para que el mercado de auditoría aumente y haya más actores en el mercado, y por tanto más posibilida­d de rotar para las empresas que tienen que ser auditadas.

El presidente del Instituto de Censores Jurados de Cuentas de España cree que «la rotación es uno de los temas enl os que la redacción e la norma europea y española ha generado insegurida­d jurídica, y es muy imortante que España siga las interpreta­ciones europeas al respecto y que no se obligue a un grupo internacio­nal a rotar antes en España que en el restode países europeos. Sería inexplicab­le y nos volvería a colocar como un país atípico en el entorno europeo de auditoría».

NOVEDADES El nuevo informe del auditor es ahora más extenso y destaca las cuestiones clave del análisis

 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain