EL PARO CAE DOCE PUNTOS Y BAJA DEL MILLÓN

La tasa de paro andaluz se sitúa 7,6 puntos por encima de la media nacional y llegó a superar los 10 en el momento álgido de la crisis

La economía andaluza ha creado 355.000 empleos en los últimos cinco años y roza ya los 3 millones de ocupados (2.967.700); si la tendencia se mantiene en el nuevo ciclo económico, la región podrá volver a las cotas de antes de la crisis y superarlas a corto plazo. En paralelo, pese a los altibajos del mercado laboral a lo largo del año, debido a la estacionalidad de actividades que mueven mucho empleo en la región, como la agricultura o el turismo, la tasa andaluza de paro muestra una evolución claramente positiva.

Así, según la última Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente el primer trimestre de este año, en Andalucía hay 975.700 desempleados, lo que representa el 24,43% de la población activa. Este porcentaje supone una mejora de casi doce puntos respecto a la tasa que había a cierre de 2013, cuando se llegó al 36,2%.

El diferencial de paro con la media de España se estrecha, lo que significa que Andalucía está convergiendo paulatinamente con el mercado laboral nacional. En concreto, a finales del primer trimestre nos separaban 7,6 puntos de la tasa media de de- sempleo en nuestro país (16,74%), una brecha que llegó a superar los 10 puntos en algunos trimestres de los años más duros de la crisis.

Por debajo de esta mejoría general persisten algunas debilidades especialmente acusadas en el mercado laboral andaluz, como la alta tasa de temporalidad (proporción de contratos temporales sobre el total de contratos); las mayores dificultades de los jóvenes y de los mayores de 45 años para encontrar trabajo y el paro de larga duración.

Sobre el primer problema, la situación apenas ha cambiado. Más de un tercio de todos los empleos que se generan en la comunidad autónoma son efímeros, en concreto el 36,20%, frente al 26,11% de media nacional, un desnivel que está vinculado en gran medida a la estructura económica andaluza, con un peso hegemónico del sector servicios y un aporte significativo de la agricultura, actividades de alta demanda de trabajadores eventuales. Así, esta tasa de temporalidad llega al 81% en el caso de la agricultura y es también muy acentuada en la construcción, donde un 57% de los empleos que se generan no tiene estabilidad.

Por su parte, en la última década se ha agudizado la situación laboral de los parados menores de 25 años, con tasas de paro que afectan a casi la mitad de este colectivo. También los desempleados mayores de 45 años encuentran más dificultades para colocarse, aunque su cuota de desempleo (22,3%) sigue por debajo de la tasa media.

El paro de larga duración es otro serio problema que preocupa no solo en Andalucía, sino en el conjunto de España y en muchos países europeos. La edad actúa como una barrera que dificulta el reempleo, según destaca un estudio realizado por Fedea. Así, pese a la recuperación económica, más de la mitad de los parados andaluces (51,7%) llevan más de un año buscando trabajo sin conseguirlo.