La mujer solitaria contra el mito
«Maria by Callas», en Movistar+, consigue lo que la soprano no logró: colocar a la persona por encima de la voz
aria Callas, 1974, tres años antes de que la muerte la sorprendiera en su domicilio de París, donde se hallaba prácticamente recluida desde hacía una década, sintiéndose rechazada por el mundo: «Hay dos personas dentro de mí. Me gustaría ser Maria, pero está la Callas, de quien debo estar a la altura, así que intento lidiar con ambas como buenamente puedo», comenta la soprano en una de las entrevistas inéditas que el director Tom Volf encontró durante sus tres años de viajes por el mundo.
De aquella exhaustiva labor arqueológica nació el documental que Movistar+ estrena hoy (22.00 horas, en su canal CineDoc&Roll y bajo demanda). En él se revela un lado diferente de la mejor cantante de ópera de la historia: el conflicto entre sus dos personalidades, la que aspiraba a la fama planetaria –«para mí cantar no es un acto de orgullo, sino un intento de alcanzar el cielo»– y la que soñaba con formar una familia y vivir en el anonimato, lejos de los escenarios. «De pequeña cantaba por diversión. Nunca me hubiera imaginado hacerlo profesionalmente. Y no creo que hubiera querido», confesaba Callas sobre su deseo de haber tenido una infancia normal, en vez de desarrollar aquel don. Habría renunciado con gusto a toda su carrera por ser madre, le dice a la periodista de la CBS Barbara Walters.
MDocumentos inéditos
En «Maria by Callas», el debutante director francés logra lo que la soprano no consiguió en 53 años de vida: reivindicar a la mujer por encima de la voz. Lo hace a través de innumerables películas privadas en Super 8 y 16 milímetros, fotografías inéditas, grabaciones pirateadas por sus admiradores, entrevistas desaparecidas y cartas íntimas con sus amigos, familiares y maridos. Algunas tan sinceras como las que se envió con el magnate Aristóteles Onassis y el director Pier Paolo Pasolini: «Estoy triste de no estar a tu lado en estos momentos difíciles, como solías estar tú para mí, pero saldrás adelante. ¡Yo lo hice, una mujer tan sensible como yo! He llegado a la conclusión de que
Un mes cargado de música
Los documentales musicales siguen ganando cuota en Movistar+. Desde el pasado día 5 se puede ver «Noches de Rock & Roll», de Fernando Colomo, a partir del concierto que Burning dio en Madrid en 2015. El pasado viernes se estrenó «Los videoclips de los 90», un viaje al pasado a un género que dignificaron cineastas como Fincher y Jonze. El próximo viernes llega «Later... with Jools Holland», donde el pianista presentará a seis artistas, uno por capítulo. «Queen. Rock Montreal» ofrece por último el mítico concierto en vivo que la banda capitaneada por Freddie Mercury dio en 1981. solo se puede contar con uno mismo», le escribe al cineasta.
Más de la mitad de estos testimonios se ven y escuchan por primera vez en este documental donde Callas se sumerge, en el fuerte sentimiento de soledad que arrastró desde que alcanzó la fama, a pesar de estar rodeada de algunas de las celebridades más importantes del siglo XX: Churchill, Warhol, Visconti, Marilyn Monroe, Grace Kelly, el Príncipe Rainiero, Kennedy, Alain Delon, Liz Taylor e Yves Saint-Laurent, entre otros.
Estamos antes un retrato entre bambalinas de
Amistad con grandes cineastas
su ascenso a la fama y su descenso al infierno, atravesando los secretos que la llevaron a su trágico destino. No hay en «Maria by Callas» un solo especialista desgranando la vida de la soprano que falleció, oficialmente, de un ataque al corazón, aunque siempre sobrevoló la sombra del suicidio. Es tan rico el material hallado por Volf que ya ha dado lugar a varias exposiciones y tres libros.
Desde los primeros minutos, la soprano reconoce que le robaron la infancia. Habla de una madre que la encontraba fea y que le presta poca atención hasta que descubre que tiene un don del que podrá sacar provecho: «¡Ella me obligó! Hasta el punto de que tuve que mentir sobre mi edad para ingresar en el conservatorio a los 13 años», revela. La niña aceptó el sacrificio para ganarse la atención y el cariño que nunca tuvo. Cuenta después la separación de sus padres, su infancia en Atenas, sus avatares en la Segunda Guerra Mundial, sus primeros maestros y el regreso a su Nueva York natal para probar suerte en el Metropolitan Opera.
A través de su correspondencia personal asistimos a su conquista de los mejores teatros y, también, de las portadas de la prensa rosa. Su vida privada comenzó a interesar tanto como sus