Ángela Molina, un Goya de Honor con aires de Lorca

▶ La actriz recogerá el galardón el próximo 6 de marzo en el teatro del Soho

Cinco veces se ha enfrentado Ángela Molina (Madrid, 1955) a la posibilidad de recoger el Goya y no ha sido hasta la sexta, con el de Honor, cuando por fin ha caído en sus manos. Llega tarde, pero llega para una actriz que ha rodado con los grandes cineastas españoles, que ha hecho carrera en la televisión y que ha convertido las tablas del teatro en su hábitat natural. Ahora, cuando bordea la edad de jubilación, recibe el reconocimiento de la Academia de Cine sin que eso de la retirada se le pase por la cabeza. «Mi único reto es seguir trabajando. Soy una persona que adora su trabajo, y aunque no funciono con retos, sí me gustaría alguna vez en mi vida interpretar un Lorca», reconoció ayer, en un encuentro con la prensa para hablar de la gala de los Goya del próximo 6 de marzo y para pedir dar vida a alguno de los personajes creados por el granadino.

Le ha tocado recibir el premio en el año más difícil. En la 35 edición de los Goya, Ángela Molina será la única que recoja el «cabezón» sobre el escenario del teatro del Soho de Málaga. «Estos Goya son igual de Goya que siempre, aunque nos tengamos que intuir porque no todos los que deberían estar van a estar», defendió. La pandemia obliga a que los nominados se queden en casa y que solo los presentadores –María Casado y Antonio Banderas–, los entregadores y algunos artistas invitados suban al escenario. Y la Goya de Honor, claro, que eso sí, acudirá sola a la gala. «No me va a acompañar nadie porque tenemos que hacerlo lo mejor que podamos. Mi familia lo disfrutará desde casa, como todos».