Fernández Tapias Se verá el martes en los juzgados con sus hijos
Aunque hace unos días se hizo público que su hijo Juan Carlos, de 36 años, tomaba el relevo empresarial, toda la familia no está de acuerdo y lucharán por el control
sta semana se hacía público el cambio empresarial de Naviera F. Tapias Galicia hasta ahora presidida por el empresario Fernando Fernández Tapias, de 82 años. Según publicaba ‘Vanitatis’ en el cambio registrado el pasado 15 de febrero en el Borme se hacía oficial el nombramiento de Juan Carlos Fernández-Tapias –hijo del empresario de 36 años– como nuevo presidente del consejo. Y aunque no se han ofrecido detalles sobre este movimiento empresarial que a algunos les ha causado sorpresa, si se ha querido aclarar que el cese no se debe a su delicado estado de salud. Tapias a pesar de haber sufrido varios achaques en los últimos años –lleva siete stens en el corazón– se encuentra bien de salud. Es padre de ocho hijos –uno falleció en 2010 mientras buceaba en Lanzarote– con tres mujeres distintas. El mayor Fernando, de 55 años, y la más pequeña, Alma de 14, fruto de su último matrimonio con la ‘socialite’ Nuria González.
EEn noviembre de 2019, el empresario ya realizó cambios en la estructura empresarial familiar, apartando a sus tres hijos mayores de todos los órganos de poder y otorgándoselo todo a Juan Carlos, al nombrarle consejero delegado de F. Tapias Grupo de Sociedades e Inversiones y de Naviera F. Tapias Galicia, según los datos publicados por el registro. Pero lo que ‘a priori’ parecía una transición familiar que ha contado con el beneplácito de todos, no parecer ser así, ya que según ha podido saber ABC, este próximo martes el empresario y sus hijos mayores se verán las caras en el juzgado. Se trata de una vista a la que esta previsto que acuda a declarar tanto Fefé, como su mujer, Nuria González, e incluso el hijo mayor de estos, Iván, de 16 años. El matrimonio será defendido por la letrada Elena Zarraluqui, experta en Derecho de Familia. Y es que la parte de la familia demandante estaría incluso barajando la posibilidad de solicitar la incapacitación de su padre para intentar conseguir que se declare nulo el último reparto empresarial o incluso evitar otros posibles cambios en las cúpulas de gestión de las sociedades familiares. Otra cosa es que puedan demostrarlo. Puestos en contacto con Nuria González, esta declina