ABC (Galicia)

El diario de papel

El director más influyente y exitoso de la prensa de EE.UU. en las últimas décadas se jubila tras haber liderado una profunda transforma­ción de su diario

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cho años exitosos e insólitos ha pasado Martin Baron al frente del diario ‘The Washington Post’. Este periodista con más de 45 años de experienci­a y que se jubila esta semana, ha convertido una cabecera que a su llegada en enero de 2013 sobrevivía a duras penas entre despidos y recortes en un titán del periodismo internacio­nal, un gigante digital reanimado desde que en agosto de aquel mismo año lo comprara el fundador de Amazon, Jeff Bezos. En sus décadas al frente de ‘The Miami Herald’, ‘The Boston Globe’ y, finalmente el ‘Post’, las redaccione­s que ha dirigido Baron (Tampa, 1954) han amasado 17 prestigios­os premios Pulitzer. En conversaci­ón con ABC en su último día laboral en el puesto, se declara un convencido de la causa digital, y advierte en contra de ejercer el activismo desde las redaccione­s periodísti­cas.

—¿Cómo ha cambiado el oficio desde que asumió la dirección del ‘Post’ en 2013?

—El mayor cambio ha sido tener que adaptar lo que hacemos al mundo digital. Tuvimos que encontrar una manera de salvaguard­ar nuestros principios tradiciona­les, y producir y distribuir noticias e informació­n de un modo que se adapte a la forma en que las personas desean recibirlos hoy en día, sea en un dispositiv­o móvil o a través de las redes sociales. Y eso está cambiando las narrativas, la forma en que contamos las historias empleando las herramient­as a nuestra disposició­n, sea video, audio, gráficos interactiv­os, animación, lo que sea. Está cambiando la forma en que nos comunicamo­s y contamos historias.

—¿Ha ido prestando menos atención al diario de papel?

—Realmente eso comenzó cuando estaba en Boston. Como tantas otras personas en nuestra profesión, lamentaba la muerte del papel, lo que significab­a para nuestro negocio, y la pérdida de ingresos y empleo. Pero en un punto, decidí que el duelo había terminado. No podía seguir de luto. Cuando pierdes a un familiar o a un amigo, tienes que seguir adelante y vivir tu vida. Sí, puedes estar de duelo, pero tienes que seguir adelante y vivir tu vida lo mejor que puedas. Entonces decidí que debía seguir adelante. Quiero decir, vale la pena seguir haciendo lo que hacemos. Es muy valioso para nuestra democracia. Es un compromiso, mi carrera, mi profesión. Así, cuando todavía estaba en Boston, comencé a prestar una enorme atención a lo digital. Cuando llegué al ‘Post’, tenía claro que nosotros,

Ocomo industria, teníamos que prestar atención a lo digital. No solo prestarle atención, sino que teníamos que convertirl­o en el foco de nuestra atención. Y que era nuestro futuro. Así que ya lo estaba haciendo desde el principio. Pero es algo que se intensific­ó con la compra por parte de Jeff Bezos. —¿Qué atención le ha prestado al diario impreso en sus últimas jornadas? —No le dedico casi ninguna atención, muy poco. Yo diría que es menos del 5% de mi tiempo.

—Hablaba de la compra del ‘Post’ por parte de Jeff Bezos. ¿Cómo cambió aquello su trabajo?

—Fue un cambio fundamenta­l para ‘The Washington Post’ y para mí. Estábamos decreciend­o. Nuestra estrategia se centraba en lo local, lo regional, no en noticias nacionales o internacio­nales. Al estar en Washington está claro que dedicábamo­s atención a la política nacional y al gobierno. Pero aparte de eso, estábamos enfocados en lo que estaba sucediendo en nuestra región. Y cuando Jeff Bezos compró el diario, dijo que esa era una estrategia que ya no iba a funcionar, que internet había demolido todos los pilares financiero­s de nuestro negocio, pero que a la vez era un regalo. El regalo era poder distribuir informació­n a todo el mundo prácticame­nte sin costo adicional. Y que estábamos en posición de aprovechar eso de una manera excepciona­l. ¿Por qué? Porque estábamos en la capital de EE.UU., unos buenos cimientos para tener una publicació­n nacional e internacio­nal, y «No le dedico casi ninguna atención, muy poco. Yo diría que ahora es menos del 5 por ciento de mi tiempo»

Las suscripcio­nes de pago

«Para que la gente pague, tenemos que ofrecerle algo por lo que valga la pena pagar, periodismo de calidad»

Donald Trump

«No hubo solo un esfuerzo por marginarno­s y por deslegitim­arnos, sino por deshumaniz­arnos»

Opinión e informació­n

«Siempre habrá medios que intentarán dirigirse a partidos políticos, a ideologías particular­es»

Redes sociales

«Los periodista­s deberían ejercer la misma moderación en las redes sociales que en sus informacio­nes» teníamos una cabecera de prestigio como ‘The Washington Post’. Teníamos la costumbre de hacer que el poder rinda cuentas, desde el Watergate. Esa era nuestra identidad, y debíamos preservarl­a ahora en formato digital. Ya no debíamos repartir periódicos por todo el país, lo cual es muy complicado, ya que este es un país muy grande. Y ahora tenemos la oportunida­d de distribuir lo que hacemos digitalmen­te. Y no nos cuesta prácticame­nte nada agregar un lector o un suscriptor adicional.

—Sí. Fue un proceso muy difícil. Analizamos cientos de opciones. Y elegimos una frase de una sentencia judicial en el caso Watergate. Jeff buscaba un lema que capturara nuestro papel único en democracia, como empresa informativ­a con sede en Washington, una frase que, al oírla, hiciera que la gente se sintiera orgullosa.

—El ‘Post’ es una excepción porque lo compró Bezos, pero otros medios no han encontrado un modelo de negocio que dé beneficios. ¿Opina que las suscripcio­nes son el futuro?

—Sí, creo que tiene que ser así, porque está bastante claro que la publicidad no va a pagarnos las facturas. Es importante recordar que antes de internet, teníamos periódicos físicos y no los regalábamo­s. Sí, hubo algunas excepcione­s, algunos pequeños periódicos gratuitos, cosas así. Pero en su mayor parte, cuando la gente quería leer un diario, tenía que pagarlo. Y creo que vamos hacia eso de nuevo. Y para que la gente pague, tenemos que ofrecerle algo por lo que valga la pena pagar. Tenemos que ofrecerle periodismo de gran calidad. De lo contrario, no pagarán. Así que creo que la única solución no es que alguien con dinero compre la publicació­n. Tiene que haber una inversión por una parte en la distribuci­ón digital de nuestro producto y comprender lo que eso significa en términos de cómo nosotros, como periodista­s, desarrolla­mos nuestro producto y cómo contamos historias. Y también tiene que haber una inversión en periodismo y reportajes. Y eso requiere dinero. —¿Qué opina sobre la adquisició­n de determinad­as cabeceras por parte de fondos de alto riesgo?

—Es muy preocupant­e. Creo que no representa un futuro muy prometedor para el sector. Me parece que son empresas que no invierten en futuro. Están calculando ganancias a corto, corto plazo. Y están tratando a esas cabeceras como mercancía. Sacarán de ellas tantos ingresos como sea posible. Recuperará­n su inversión y más. Y cuan

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—En 2017, días después de la toma de posesión de Donald Trump, añadieron un lema bajo la cabecera del diario: «La democracia muere en la oscuridad». ¿Participó usted de esa decisión?
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