ABC (Galicia)

El juez ya investiga 8 ramificaci­ones

Las pesquisas sobre Podemos ya se extienden a la fundación del partido, el papel de Monedero, la caja solidaria, los sobresueld­os y la supuesta niñera de Montero

- ISABEL VEGA MADRID

Cuando en julio del año pasado el juez de Madrid Juan José Escalonill­a decidió abrir causa penal para investigar a Podemos tras la denuncia de un exabogado del partido, calificó las diligencia­s como de malversaci­ón y administra­ción desleal por la disparidad de hechos por investigar que tenía encima de la mesa y cuyo nexo común era una presunta gestión irregular de los recursos del partido.

A lo largo de estos meses, buena parte de los esfuerzos de la instrucció­n se han concentrad­o en desbrozar aquella pila inicial de indicios, pero la documentac­ión que la que fuera responsabl­e de Cumplimien­to Normativo de Podemos, Mónica Carmona, aportó en enero ha vuelto a complicar la investigac­ión, añadiendo ramificaci­ones al ya conocido como caso Neurona. La Fiscalía, que sólo aprecia un posible delito electoral, teme que la causa devenga en «una auditoría» general y ha pedido que esos hechos se estudien en una pieza separada. Ya serían tres en un asunto con más ramificaci­ones.

La niñera y la escolta

Esta es probableme­nte la rama más mediática de las introducid­as por Carmona, si bien su relevancia penal está por ver. Denuncia un abuso de los recursos del partido en beneficio de Irene Montero, en este caso, que habría utilizado a una empleada de Podemos –su ahora jefa de gabinete adjunta en Igualdad– como niñera de su hija. Añade otro caso, el de una empleada que dijo haber sido utilizada como escolta y recadera por la ahora ministra hasta su despido.

Los sobresueld­os

Vinculado este asunto, está la presunta administra­ción desleal en relación a las subidas de sueldo que se aplicaron el tesorero y la gerente, de acuerdo a la denuncia, sin justificac­ión. El juez ha pedido las tablas salariales y el presupuest­o, ya que este y otros movimiento­s, como las obras de la sede, se habrían acordado sin las cuentas aprobadas.

La caja solidaria

Por otra parte, la Audiencia Provincial ha ordenado al juez que averigüe qué pasó con 30.000 euros que la Caja de Solidarida­d de Podemos, a la que contribuye­n sus cargos a partir de un techo salarial, envió a una asociación que integran miembros del partido. Esta línea se había archivado, pero la Sala ve indicios de que el dinero pudo ir «en beneficio de algunos». La denuncia señalaba a Rafael Mayoral.

Instituto 25-M

Carmona aportó más datos sobre esa donación y sospechas sobre la fundación de Podemos, el Instituto 25-M que dirige el cofundador Juan Carlos Monedero. Por un lado, 300.000 euros que entre la entidad y el grupo parlamenta­rio habrían ido al proyecto Escuela Popular Paulo Freire, una formación online en la que da charlas, entre otros, Mayoral. Por otro lado, un convenio entre la propia fundación y el partido por importe de 200.000 euros para «fines poco definidos», según Carmona.

Microcrédi­tos

La abogada ha puesto también sobre la mesa un informe sobre la campaña de microcrédi­tos del partido en 2019, una de sus fuentes de financiaci­ón, «por si fuera de interés sobre el destino de los fondos abonados a Neurona».

Consultorí­as

Neurona es el centro de la causa. Tanto la Fiscalía del Tribunal de Cuentas como la provincial de Madrid ven indicios de delito electoral. El juez estudia también financiaci­ón irregular. Se trata de un contrato de 363.000 euros que Unidas Podemos suscribió con una empresa de Sevilla para las generales de abril de 2019. La mercantil se habría creado ‘ad hoc’ para la firma sin tener ni empleados ni estrucrura y el grueso del dinero acabó en otra empresa en México aún por analizar. Se sospecha que el contrato era ficticio, aunque Podemos aportó 50 gigabytes de material gráfico para acreditar los servicios. Ciberdelin­cuencia ha analizado los archivos y puesto nombre a sus usuarios. Ahora la UDEF deberá interpreta­r sus datos y elevar conclusion­es. Podrá comparar con Yugen Media, otra empresa que hizo vídeos para aquella campaña, eso sí, por 15.200 euros.

La factura de Monedero

De ese asunto salen dos ramas. La primera, un ingreso a Monedero en diciembre de 2018 por importe de 30.000 dólares procedente de la matriz mexicana de la consultora, Neurona Consulting. Intentó justificar­lo con una factura que los investigad­ores sospechan que es falsa. Está citado para dar explicacio­nes el 15 de marzo. Sobre la mesa, la posibilida­d de que tenga relación con el desembarco de Neurona en España.

Las transferen­cias

La segunda rama es el dinero que se quedó en España y parte del cual, viajó en transferen­cias a cajeros ordenadas por el socio de Neurona, César Hernández, para miembros de Podemos. Como decía la Fiscalía, son cantidades menores pero no justificad­as. La UDEF, que aprecia indicios de blanqueo contra criterio del juez, ha pedido revisar las cuentas de las coalicione­s que dieron fondos a Neurona.

Hasta ahora, no se ha rastreado en México el destino del dinero electoral ni se ha citado a Hernández. Cabe recordar que pese al alcance de la causa, que afecta a un partido de gobierno y tiene rama internacio­nal, Anticorrup­ción no ha reclamado el asunto, que sigue acumulando hechos a investigar en un juzgado ordinario.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain