Atacan una base de EE.UU. en Irak en vísperas de la visita del Papa
La situación de seguridad se complica en Irak debido al pulso indirecto entre Estados Unidos e Irán, pero desde el Vaticano anunciaron que el viaje del Papa que arranca mañana no sufrirá cambio alguno. Por segunda vez en menos de un mes, una base empleada por soldados de Estados Unidos y de la coalición internacional fue atacada en suelo iraquí y al menos un empleado civil murió. El portavoz de la coalición en la que participa EE.UU., el coronel Wayne Marotto, informó de que diez cohetes impactaron a primera hora de la mañana en la base de Ain al Assad, al oeste del país.
Tras el repliegue ordenado por Donald Trump, este es uno de los puntos principales con presencia estadounidense y fue también una de las bases atacadas por Irán en enero de 2020, en la operación de respuesta por el asesinato de Qassem Suleimani, general al frente de la Fuerza Al Quds, el brazo de operaciones en el exterior de la Guardia Revolucionaria. En Irak quedan unos 2.500 soldados estadounidenses en el marco de la operación contra el grupo yihadista Daesh.
En la base Ain al Assad se encuentra la Task Force Toro, del Ejército de Tierra español, con una rotación compuesta por 70 militares y tres helicópteros Cougar de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra (Famet). «Todos se encuentran bien. Ni ha habido heridos ni daños materiales», aseguran a ABC fuentes del Estado Mayor de la Defensa, según informa Esteban Villarejo.