Viaje a Irak Atentados y tensiones entre las milicias chiíes y EE.UU. amenazan la seguridad del Papa
▶ Los puntos más calientes de la visita son Bagdad y Mosul, donde Daesh tiene mayor presencia
A pocas horas de la visita del Papa Francisco, Irak se enfrenta a un gran desafío en términos de seguridad. El Gobierno anunció a finales de 2017 la derrota territorial de Daesh (Estado Islámico) y desde entonces había conseguido una relativa calma en comparación con años anteriores. A principios de diciembre de 2020, el Vaticano anunció la peregrinación de Francisco, quien no viajaba desde finales de 2019 debido a las restricciones impuestas por la pandemia de Covid-19. Desde el anuncio, un ataque terrorista en Bagdad y el aumento de las tensiones entre las milicias chiíes locales y Estados Unidos han arrojado dudas sobre la capacidad del Gobierno iraquí de mantener una visita estable, ya que serán las autoridades locales quienes se encargarán de garantizar la seguridad del Santo Padre.
Después de años de esfuerzo en la lucha contra el terrorismo, el Gobierno iraquí tiene ahora la oportunidad de demostrar que está preparado para un evento histórico como la llegada este viernes del Papa Francisco. Las autoridades aún no han dado detalles concretos sobre las medidas que se tomarán los tres días de travesía del Santo Padre en el país, pero lugares donde estará presente como Bagdad, Nayaf o Mosul han aumentado los controles y restringido los desplazamientos entre ciudades. Sajad Jiyad, analista de seguridad iraquí, afirma que a pesar de los desafíos, las autoridades tienen experiencia en acontecimientos de este tipo.
«En visitas de alto perfil como esta, el Gobierno despliega una gran cantidad de fuerzas, restringe áreas y el tráfico, sube el nivel de los puestos de control, sobrevuela las ciudades que acogen el evento y también despliega agentes de inteligencia y seguridad», explica. La Golden Division, unas fuerzas especiales entrenadas por Estados Unidos, estarán presentes en todos los lugares que visite el Papa.
El Vaticano anunció el martes la posibilidad de utilizar vehículos blindados en caso de que las autoridades iraquíes lo vean imprescindible. También confirmó que renunciará al uso de automóviles descubiertos en las calles, por razones de seguridad y para evitar aglomeraciones de personas ante el leve aumento de casos de coronavirus.
La pandemia ha allanado el terreno al Gobierno iraquí en términos de seguridad. El toque de queda de ocho de la tarde a cinco de la mañana y la prohibición de desplazamientos entre ciudades, medidas que seguirán vigentes durante la visita del Papa, facilitarán la vigilancia en todas las zonas. «Esto ha venido bien porque habrá menos movimientos en las calles y será algo más fácil», comenta Jiyad.
Células durmientes
Los puntos más calientes de la travesía de Francisco son Bagdad y Mosul. El pasado 21 de enero un doble atentado suicida de Daesh en un mercado de ropa de la capital mató a 32 personas y centenares resultaron heridas. El ataque volvió a recordar a los iraquíes que la relativa paz de los últimos años después de la derrota de ISIS era solo un espejismo en un país que lleva décadas bañado en sangre. Tras el atentado, el Gobierno de Irak realizó cambios inmediatos en su liderazgo militar, policial y de inteligencia, emprendiendo una de las reorganizaciones más importantes de su historia reciente.
Las células durmientes de Daesh continúan activas y realizando ataques esporádicos en diferentes áreas del país, aunque sobre todo en zonas montañosas y desérticas. «Mosul y Bagdad son las zonas más sensibles y donde Daesh tiene mayor presencia.
¿Quién le protege? La Golden Division, una unidad de élite entrenada por EE.UU. velará por su seguridad
Seguro que habrá un gran dispositivo de seguridad en ambas ciudades para evitar ataques», puntualiza Jiyad.
Otro motivo de preocupación para las autoridades iraquíes es el ataque con cohetes del pasado 15 de febrero cerca del aeropuerto de Erbil, en el Kurdistán iraquí, uno de los puntos habitualmente más estables del país.
La agresión presuntamente tuvo como objetivo una base donde están