El presidente cree que Galicia camina segura por la senda acordada hace ahora 40 años
Feijóo enfría una reforma del Estatuto que piden BNG y PSdeG ▶
pacientes ingresados (10 más) y en las UCI hay tres más hasta situarse en 30.
Por el momento, las augas residuales tampoco evidencian de forma clara la llegada de una cuarta ola en Galicia. Según el profesor de la USC, Jesús López Romalde, se empieza a notar «un aumento pero muy lento» en la mayor parte de estaciones. López Romalde analiza en el laboratorio del Cretus de la Universidade de Santiago las muestras de las depuradoras de Vigo, Orense y Lugo por encargo del Ministerio y las de Santiago gracias a un convenio con la Xunta. Las últimas muestras corresponden a principios de la semana pasada, pero las augas residuales ya avisaron con unos 10 días de antelación del inicio de la devastadora tercera ola.
No varía la cifra de fallecidos que lleva unos días estancada en 2.368 personas. Los efectos de la vacunación en los colectivos con mayor riesgo podrían estar empezando a sentirse. Tras las vacunaciones masivas que se están registrando en los últimos días, en Galicia 546.630 personas cuentan al fin con una dosis y 186.056 han recibido ya la pauta completa. El porcentaje de mayores de 80 años que ha recibido el primer pinchazo llega al 92,5% (dos puntos por debajo de la media española) mientras que alcanza el 29,6% en el grupo de entre 70 y 79 años.
En declaraciones a los medios en Orense, Alfonso Rueda explicó ayer que no habrá «sorpresas» en las medidas que adopte el comité clínico. «De nada serviría», dijo según informa Ep, hablar de un gran paso en cuanto al aumento de libertades, «aumentar horarios, hablar de levantamientos de perímetros hasta que no haya muchísima más seguridad». Por lo que si hay avances, «serán avances prudentes», recalcó.
La incidencia acumulada a 14 días sube con 70 por cada 100.000 habitantes
El Estatuto de Autonomía de Galicia cumple 40 años al tiempo en que se reabre el debate sobre una posible reforma. El Parlamento de Galicia celebró ayer la efeméride con una jornada conmemorativa que clausuró el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. Poco antes de su intervención, los portavoces de la oposición volvían a reclamar en rueda de prensa una «modernización» del texto que debería empezar a negociarse una vez superada la pandemia del Covid. Pero Feijóo se mostró reticente. «Debemos de ser extremadamente cuidados, a la hora de derogar lo que «funciona» y «genera acuerdo entre la mayor parte de la población», subrayó.
El presidente aseveró que «ningún Estatuto o Constitución son una solución mágica y perenne, sino caminos por los que transitar de forma segura». Y recordó que Galicia «camina segura» gracias al marco de convivencia pactado hace 40 años. Feijóo contrapuso la situación del autogobierno en Galicia con el de Cataluña. Frente al modelo estable que el observa en la Comunidad «existe otro que lleva a una crisis crónica en la que resulta difícil recomponer los más mínimos consensos», subrayó. «Y no debemos olvidar que ese proceso que sume en la incertidumbre a una de las comunidades que antaño fue la vanguardia de España, se inicia con una reforma estatutaria precipitada y frustrante», recordó el presidente para el que el autogobierno gallego es un «éxito» de la España de las autonomías.
En la habitual rueda de prensa de los lunes y desde fuera del acto conmemorativo, los portavoces de la oposición sí reclamaron cambios en el Estatuto. Tanto el BNG como el PSdeG consideran que, una vez superada la crisis sanitaria del coronavirus, Galicia debe abrir el debate para la reforma y «modernización» de su Estatuto de Autonomía.
En línea con Feijóo, el portavoz parlamentario del PPdeG, Pedro Puy, consideró que el marco legal goza de vigencia para afrontar los retos actuales de la Comunidad.
Para la líder del
BNG, Ana Pontón, Galicia debe «avanzar» para tener «un autogobierno que merezca ese nombre». Según informa Ep, la portavoz nacionalista considera que el Estatuto del 81 «no se demostró como una herramienta eficaz» para afrontar «los problemas del país». «Galicia necesita poder político real», apostilló Pontón. Los socialistas gallegos, comparten la idea de repensar el marco estatutario pero para «modernizar» y «poner al día» el texto actual, afirmó su secretario,
«Debemos de ser extremadamente cuidadosos a la hora de derogar lo que funciona y genera acuerdo»
Gonzalo Caballero. El PSdeG defiende que el actual Estatuto, no debe «meterse en el desván» sino que debe servir de «cimientos para construir la Galicia del futuro» en torno a las «ideas» del «autonomismo», el «federalismo» y la «cogobernanza» en aras de buscar el encaje en «una España plural y diversa que respeta el marco constitucional».
Presidente del TC
El presidente del Tribunal Constitucional (TC), Juan José González Rivas, con raíces en Xunqueira de Espadañedo (Orense), fue el encargado de abrir en O Hórreo la jornada conmemorativa del 40 aniversario del Estatuto, en la que también participaron los directores de los principales periódicos de Galicia. Gónzález Rivas reivindicó que la política de las «soluciones consensuadas» y del «pacto», como motores de origen de la Constitución y del Estatuto de autonomía gallego, al tiempo que erigió a Galicia en una «comunidad ejemplar». El presidente del TC reconoció el papel de un Estatuto que «ha propiciado el mayor progreso» en Galicia, así como la «consolidación» de los principios democráticos y «avances sociales».
Por su parte, el presidente de la Cámara autonómica, Miguel Santalices, reinvindicó la «lealtad institucional y constitucional» que siempre ha mantenido el Parlamento Gallego.