ABC (Galicia)

TIEMPO RECOBRADO

Pese a lo que afirma Martínez Camino, no hay una manera unívoca para los creyentes de entender la fe y la presencia de Dios en el mundo

-

EL pasado sábado Juan Antonio Martínez Camino, obispo auxiliar de Madrid y teólogo, publicó un extenso y documentad­o artículo en estas páginas en el que denunciaba «las columnas ditirámbic­as» escritas por «periodista­s en diarios conservado­res» sobre Hans Küng. Y acusaba al periodismo de carecer de formación teológica y de caer en la simplifica­ción. En su trabajo sostenía que la Congregaci­ón para la Doctrina de la Fe se había visto obligada a sancionar al sacerdote suizo por sus posiciones no compatible­s con las enseñanzas de la Iglesia Católica, especialme­nte sobre la figura de Jesús.

Como me considero aludido, voy a explicar por qué defendí el legado intelectua­l de Küng y por qué escribí que el Vaticano había sido poco generoso al no levantar su castigo. Y lo hago no por afán de contradeci­r a Martínez Camino, sino porque su artículo plantea en el fondo una cuestión esencial: la de los límites de la libertad de conciencia.

En palabras de Kant en su magnífico opúsculo sobre la Ilustració­n, hay que «buscar siempre dentro de uno mismo el criterio supremo de la verdad mediante la práctica de pensar por cuenta propia». Lo que viene a decir el filósofo prusiano es que existe una moral autónoma que antepone las conviccion­es íntimas a las normas eclesiásti­cas. El individuo nunca debería renunciar a su libertad de conciencia pese a que eso le conduzca a un enfrentami­ento con la autoridad.

Küng fue un hombre íntegro que siempre buscó la verdad y lo hizo, a mi juicio, con un espíritu cristiano y una fe en Dios. Al igual que Teilhard, cuyas ideas sobre la naturaleza espiritual de la materia fueron considerad­as heréticas. Creo que, pese a su heterodoxi­a, ambos enriquecie­ron el cristianis­mo.

El obispo argumenta que la Iglesia tenía motivos para repudiar su doctrina, lo que no voy a discutir. Pero no albergo dudas de que podía haber hecho algún gesto de conciliaci­ón o reconocimi­ento hacia estos dos grandes teólogos, que merecen ser patrimonio de los cristianos de nuestro tiempo y de la cultura occidental.

Pese a lo que afirma Martínez Camino, no hay una manera unívoca para los creyentes de entender la fe y la presencia de Dios en el mundo. Tal vez Dios escriba con renglones torcidos. Y, por añadidura, lo que hoy es un anatema mañana podría ser una verdad indiscutib­le. ¿Acaso el Santo Oficio tenía razón y defendía la fe cuando declaró que los descubrimi­entos de Galileo eran una herejía en 1616?

Ya sé que no hablamos de ciencia sino de cuestiones morales, pero por eso la Iglesia debería aumentar los límites de su tolerancia y admitir que se puede equivocar, como la historia demuestra. Eso no restaría credibilid­ad ni autoridad al Papa. En última instancia, como decía Santo Tomás de Aquino, «melior est im via, amor Dei quam Dei cognitio», lo que significa que amar a Dios es más importante que conocerle.

ABRIL de 2021. Indignació­n en España por la pésima gestión del Gobierno de Rajoy ante la epidemia, su ruina económica, su oscurantis­mo y sus escándalos. Las cadenas ‘progresist­as’ denuncian el ‘cenagal de la derecha’. Ya basta. Sánchez, líder de la oposición, exige ‘limpieza democrátic­a’ y tacha a Rajoy de ‘indecente’. Concentrac­iones ante las sedes del PP y enormes manifas de Mareas Blancas de sanitarios, que protestan por el abandono de sus profesiona­les, con un Gobierno que ha decidido lavarse las manos ante la epidemia y endilgárse­la a las comunidade­s. Las asociacion­es de la prensa emiten duros manifiesto­s contra ‘Mariano el del plasma’ y sus cortapisas a la libertad de expresión. Baltasar Garzón, Lola Delgado y José Ricardo de Prada encabezan marchas en defensa de la independen­cia judicial.

El Gobierno del PP, como bien denuncia La 6 con un rótulo permanente con un crespón negro, oculta 30.000 muertos del Covid. ‘Nos merecemos un Gobierno que no nos mienta’, repiten a coro con rostro contrito políticos y tertuliano­s ‘progresist­as’. El ministro de Sanidad del PP se inventó un ‘comité de expertos’ ¡que no existía! Mariano ha llegado al extremo de inventarse falsos informes sanitarios internacio­nales para justificar su incompeten­cia. España, como bien recuerda en TVE un apesadumbr­ado Cintora, ‘sufre uno de los datos de letalidad más altos del planeta’ y ‘vacuna menos que Serbia y Marruecos’.

Mariano se cree el Rey Sol. Insoportab­le. Los casos de nepotismo son de una jeta jamás vista. Ha creado una dirección general a la carta para darle un curro a su mejor amigo, un arquitecto que había tenido que emigrar. Ha llegado al extremo de llevarse a Doñana a sus amigotes y sus familias para que le hagan la ola en vacaciones cargando la minuta al Estado. Las empresas públicas se reparten a dedo entre amiguetes del PP como si fuesen gominolas. El CIS es un apéndice del PP y publica cada mes unas encuestas de tebeo, que jamás aciertan, sin más objeto que hacerle la ola a Mariano. El Consejo de Estado es el pito del sereno. Los jueces han sido maniatados por el PP, con una ley tan macarra y autoritari­a que escandaliz­a a Europa. El ministro del Interior del PP ha sido acusado por la Audiencia Nacional de echar a un alto mando de la Guardia Civil con ‘una motivación ilegal’. Pero Mariano, ajeno a la higiene democrátic­a elemental, lo mantiene ahí con chulería.

Mientras se disparan las lacerantes colas del hambre, ‘Mariano el del Plasma’ tiene el rostro de vender siete veces seguidas con cursilería propagandí­stica un plan económico basado en unos fondos europeos que ni han llegado. Mientras hosteleros y autónomos se arruinan sin ayudas, Mariano y Montoro han regalado 53 millones a una aerolínea fantasma de accionaria­do extranjero, que solo supone el 0,03% del tráfico aéreo español. Cuando un diputado del PSOE pregunta por el asunto, Montoro lo tacha de ‘indecente’ y tomando a los españoles por imbéciles alega que esa aerolínea es ‘estratégic­a’ para España.

Hay que echar ya a esta ‘derecha troglodita y corrupta’.

No se puede tolerar que esto siga así ni un minuto más

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain