El PP de Orense insta al PSOE a que diga si quiere la coalición
▶ Piden «conversaciones leales» para formar gobierno y desbancar de la alcaldía a Jácome José Tomé no rectifica y los populares se van del pleno
La tensión continúa ‘in crescendo’ en la ciudad de Orense debido a la falta de acuerdo entre los socialistas y conservadores gallegos que posibilite desbancar al actual alcalde municipal, Gonzalo Pérez Jácome, de la alcaldía y garantizar la gobernabilidad de la tercera ciudad de Galicia. El último capítulo se vivió ayer en el Parlamento gallego con declaraciones cruzadas entre ambas formaciones, PP y PSOE por la crisis municipal de la ciudad. Allí, el PSdeG-PSOE elevó su tono por la campaña del PPdeG contra el cabeza de lista socialista en el ayuntamiento de Orense, Rafael Rodríguez Villarino por exigir la retirada de la vida política del orensano como condición para sumarse a una moción de censura contra el gobierno de Jácome en la ciudad.
Con este nuevo acto, los socialistas escenificaron su apoyo a Rafael Villarino en la cámara autonómica frente a la campaña «extremista» y comportamientos «antidemocráticos» de los conservadores gallegos durante la sesión plenaria en la que todos los diputados socialistas urgieron a Feijóo que rectifique. La demanda del PPdeG de exigir la renuncia del candidato del PSOE para desbancar a Gonzalo Pérez Jácome de la alcaldía de la tercera ciudad de Galicia, ha reactivado el enfado en las filas socialistas.
El vicesecretario xeral y portavoz del PSdeG, Pablo Arangüena, quien este fin de semana emplazaba al PP de Galicia de «actuar como Vox» por mantener la exigencia de que renuncie al acta de concejal el portavoz municipal socialista, volvió a cargar durante el debate de una propuesta legislativa contra los populares por el veto a Villarino que ve como «una muestra más de que Vox está en el PPdeG» y un «caldo de cultivo» para el fascismo. La respuesta llegó a través del diputado del PPdeG, Alberto Pazos, quien reprochó al PSOE que censure esta petición cuando fueron «los que pidieron que se apartara a Baltar» de la diputación provincial. Y es que en el PP de Orense tienen claro que no van a «regalar» la alcaldía al PSOE liderado por Rafael Rodríguez Villarino, para que gobierne en minoría «porque lo que precisa la ciudad en este momento es un gobierno estable, de mayoría y solvente». De seguir así las cosas, Jácome podría acabar su mandato en 2023.
Los populares continúan sin fiarse del movimiento realizado por el candidato socialista de apartarse para facilitar un gobierno e incluso no descartan que busque ser alcalde en la sombra e incluso volver a la Alcaldía municipal, si continúa como concejal, en caso de renunciar el candidato propuesto. Así lo dejaba entrever, el propio presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, quien hace unos días se mostró cauto tras el anuncio del portavoz del PSOE de que estaba dispuesto a hacerse a un lado y apartarse para que el PP aúne fuerzas y promover una moción de censura que desaloje al alcalde, Gonzalo Pérez Jácome, respecto a «si es una propuesta fiable». De forma más contundente se pronunciaba el presidente de la diputación y del PP de Orense, Manuel Baltar, quien supeditó cualquier posible acuerdo a la renuncia del socialista.
Por el momento, el coordinador local del PP, Jesús Vázquez, insiste en garantizar «conversaciones leales» para conformar un gobierno de coalición, siempre que Villarino abandone la corporación local y, por ende, la provincial y que el PSOE esté dispuesto a conformar un gobierno de coalición. En un comunicado remitido a los medios, el PP orensano ha pedido al PSdeG-PSOE que «diga claramente» si el partido apoya la propuesta realizada para configurar un gobierno en mayoría, una vez culminado el plazo dado por los socialistas para llegar a un acuerdo. Lo que el PP espera, para empezar, es que el grupo socialista tenga «libertad absoluta y autonomía» para hablar con el PP. Para los populares, la única alternativa pasa por configurar un gobierno de coalición, con PP y PSOE, «encabezado por un alcalde o alcaldesa socialista», sin Villarino, opción que no contempla el PSdeG, quien escenificó ayer el respaldo de la dirección gallega al portavoz socialista en la Cámara.
«Intento de chantaje»
En una rueda de prensa convocada de urgencia, el secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, arremetió contra este nuevo «intento de chantaje» en una estrategia «antidemocrática» por parte de los populares a los que ha comparado con Vox, formación de «ultraderecha» que «quiere expulsar de los debates electorales de Madrid a las fuerzas políticas que piensan distinto a ellos». El portavoz de los socialistas en el Parlamento gallego volvió a referirse a Villarino como el «alcalde legítimo» de la ciudad, de no haberse llegado al «pacto letal» del PP con Jácome (a cambio de los votos de Democracia Ourensana para mantener a Baltar al frente de la Diputación). Por este motivo, emplazó al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, a que «dé la cara» por el pacto suscrito por PP-DO «a cambio de mantener la presidencia de la diputación y se pronuncie sobre la gobernabilidad del ayuntamiento».
«Es hora de que Feijóo dé la cara por el pacto del PP con Jácome», que fue la tercera fuerza política y de quien Feijóo decía que era letal para Orense», esgrimió Gonzalo Caballero, quien acusa al PP de haber «vendido» a la ciudad a cambio de mantener la presidencia de la Diputación. En esta misma línea, el socialista Rafael Villarino, quien ya ha avanzado que no piensa dimitir, cargó contra la «inadmisible» postura del PP de querer apartarlo de la vida política por estrategia política.
El secretario provincial no entiende el «retroceso» de los conservadores para pedir que se aparte de la vida política. Por este motivo, invitó al PP que «recupere la senda del 78» y pida «disculpas públicas comenzando por su presidente Alberto Núñez Feijóo». Así las cosas, Jácome se frota la manos en la alcaldía, convencido de que puede llegar al final de su mandato, pese a que gobierna con el único apoyo de dos ediles.
Enfado socialista La demanda del PPdeG de exigir la renuncia del candidato del PSOE reactiva el enfado socialista