De Cos pide usar 8.000 millones de la UE para la ‘mochila austríaca’
▶ El Banco de España alerta de los riesgos de la recuperación y reclama reformas
«Consensos amplios». Es el mensaje que ayer lanzó el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, y lleva meses reclamando Bruselas para que el Gobierno prepare una ambiciosa agenda de reformas acordada con la oposición. Entre sus peticiones, el supervisor concretó una de las más habituales: la ‘mochila austríaca’. Este mecanismo consiste en la aportación por parte de la empresa de un fondo para cada trabajador que después puede recuperar al jubilarse, por despido o, parcialmente, si se cambia de empresa. En su informe anual, el Banco de España propone un sistema en el que se fija una reducción del 50% de los costes de despido actuales para las empresas que, a cambio, tendrían que pagar las ‘mochilas’ de sus empleados, a razón de seis días por año trabajado.
Para ayudar a las compañías a ‘llenar las mochilas’ de sus trabajadores en un inicio, el Banco de España propone que el Estado aporte 8.031 millones en los primeros cuatro años –a razón de cinco días por año trabajado en el primer ejercicio, cuatro en el siguiente, después tres y por último dos–. Parte de esta financiación, propone, puede venir de los fondos europeos. De esta forma, calcula que el coste para las compañías sería muy similar al del actual sistema, tomando de referencia lo que ocurrió en el mercado laboral en el periodo 20132016 y simulando que entonces se hubiera adoptado este régimen mixto transitorio.
El supervisor pone de ejemplo a un trabajador con un salario
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos mensual de 1.500 euros al mes, con inicio de contrato el 1 de enero de 2011, que sufriese un despido objetivo por razones económicas el 31 de diciembre de 2014, percibiría 60 días de sueldo (20 por cada año anterior a la reforma y 10 por cada uno posterior), es decir, 3.000 euros de indemnización. Además, dispondría de otros 600 euros en su fondo individual (6 días por año después de la reforma) para un total de 3.600 euros. Ese mismo trabajador, en el esquema actual sin reforma, percibiría 80 días (20 por cada uno de los cuatro años de antigüedad), es decir, 4.000 euros. Por el contrario, si el trabajador se moviese voluntariamente a otra empresa, en el esquema actual no percibiría nada, pero dispondría de un fondo de 600 euros bajo la reforma propuesta.
La intención del sistema, en palabras del Banco de España, sería mitigar los costes de la indemnización por despido a lo largo de la vida laboral del empleado, además de desvincular, parcialmente, los despidos del coste de cada trabajador. La propuesta del Banco de España llega en un momento clave para la reforma de las pensiones y laboral pedidas por la Unión Europea a cambio de recibir los 140.000 millones de euros en fondos. La ‘mochila austríaca’ es un instrumento reclamado en repetidas ocasiones a España por la Comisión Europea y el FMI. La propia vicepresidenta económica, Nadia Calviño, incluyó en la Agenda del Cambio de 2019 la medida, a la que se opone fuertemente Podemos.
La propuesta del Banco de España trata de salvar este argumento manteniendo los días por año trabajado que genera el trabajador –suman indemnización y ‘mochila’, eso sí–, aunque admite que hay casos en los que habrá empleados que salgan perdiendo y ganando, así como empresas. Para desincentivar que la medida eleve las firmas que disparen sus despidos , el Banco de España propone penalizaciones.
«Prudencia» en los bonus
Como fuere, la institución cree que la recuperación enfrenta una «considerable incertidumbre», derivada de la recuperación del turismo, la vacunación y de las reformas. De Cos también se pronunció sobre el sueldo de los banqueros, tras la polémica ante las críticas del Gobierno en un momento en el que hay miles de despidos en el sector, y pidió a la banca actuar «con extrema prudencia» en las «políticas de distribución de dividendo y remuneración variable», recordando que «las entidades siguen beneficiándose» del respaldo público». Junto a estos problemas económicos, el Banco de España aborda un asunto de índole social y territorial como la despoblación. El supervisor alerta de que hay 3.403 municipios en riesgo de despoblación (el 42% de los municipios de España), un porcentaje muy superior al presente en Europa. En Alemania solo un 1% de los municipios están en esta situación, frente al 7% de Francia o el 4% de Italia. Solo Letonia, Finlandia y Estonia superan a España en la UE.