Cinco concellos y la Mariña lucense acaparan el 88% de la obra nueva en Galicia
Hace siete años tenía legitimidad y derecho; ahora, la aureola de quien llevó su particular calvario «Falta» oferta y esta se focaliza en contornos próximos al litoral, dice la patronal inmobiliaria
Está por despejar la incógnita de si la caída de José Ramón Gómez Besteiro, expresidente de la Diputación de Lugo y exsecretario general del PSdeG fue más celebrada en su día por el PPdeG o por algunos compañeros de militancia del ahora delegado del Gobierno en Galicia, quienes creyeron ver en ella un hueco más y un peldaño menos en el escalafón. Ustedes ya conocen lo de aquel monaguillo que palmoteaba de alegría cuando murió un Papa: «Es que así corre el escalafón». Y, por lo demás, ya saben ustedes que a veces resulta difícil diferenciar la afinidad del encono.
Pero, sutilezas aparte, el caso es que después de siete años de descalificaciones, insidias, acusaciones falsas, deslealtades, ostracismo y travesía del desierto, hete aquí que Besteiro reaparece en el nomenclátor político gallego no sólo rehabilitado y limpio de polvo y paja, sino reavivado, acrecido y entronizado como la gran esperanza socialista para alcanzar la presidencia de la Xunta cuando toque. Hace siete años Besteiro tenía legitimidad y derecho; ahora tiene, además, la aureola de quien llevó ejemplarmente su particular calvario: en silencio, sin victimismos y sin abrir el grifo de la manguera del estiércol.
Más que reclamar explicaciones e indemnizaciones por los daños causados, procede valorar los posibles efectos directos del ‘caso Besteiro’ sobre las elecciones del 28M. Porque todavía son muchas las nubes que oscurecen el origen y puesta en marcha de las imputaciones finalmente resueltas en archivo y punto final. Que una de las candidatas a la alcaldía de Lugo haya sido señalada como posible impulso delator es algo más que una anécdota. Y no hace falta recordar aquí el principio de causalidad eficiente, tan sobado por los juristas.
Las aspiraciones de los partidos y los recursos aplicados a alcanzarlas son casi siempre legítimos. Casi siempre. Porque, aunque a veces lo parezca, no todo vale en política.
Los concellos de Vigo, La Coruña, Santiago, Sanxenxo y Oleiros y la comarca de la Mariña lucense acaparan el 88% de los proyectos de obra nueva que se desarrollan actualmente en Galicia. Así lo revela el último informe compartido por la Federación Gallega de Empresas Inmobiliarias (Fegein) en su radiografía del sector, y en él da cuenta de la necesidad del propio mercado de que exista una mayor oferta ante una situación de demanda creciente, especialmente en territorios del litoral. Por otra parte, la vasta mayoría de las regiones del interior de la Comunidad no cuenta a día de hoy con ninguna promoción de obra nueva.
Según se desprende del documento, La Coruña es la provincia que más proyectos aglutina de los 214 que hay en curso en Galicia, con 90; seguida por Pontevedra, con 88; y, dando mayores saltos, Lugo, con 30; y Orense, con solamente 6. La presencia de promociones de obra nueva es «testimonial o directamente ninguna en el sur de la provincia de Lugo, la práctica totalidad de la de Orense y el interior de las provincias de Pontevedra y La Coruña», cita Fegein en su informe, mientras que su oferta se localiza en contornos próximos a la costa.
Perspectivas de crecimiento
Los resultados del estudio dibujan un perfil del comprador «variado» cuya razón de compra habitúa ser, por orden, la de vivienda habitual, la de segunda residencia y la de vivienda para derivar al segmento del arrendamiento vacacional. Atestiguan, también, «una fuerte recuperación en los últimos 15 meses de la compraventa de segundas residencias en la costa gallega», actividad a la que Fegein augura «perspectivas positivas para este verano». Presagian, también, cierto encarecimiento en el precio de la vivienda nueva, principalmente en las siete grandes ciudades y sus áreas metropolitanas, a causa de «la falta de oferta en los municipios más demandados, el aumento de los precios del suelo o el incremento de los costes de construcción e incremento de los salarios».
Realizado este repaso del sector, el informe concluye que el mercado en Galicia demanda más vivienda de obra nueva «a pesar» de los incrementos de precios derivados del coste de materiales, combustibles y energía. Concretamente, sentencia, «las ciudades de Vigo y La Coruña y sus áreas metropolitanas necesitan más obra nueva ante una pujante y progresiva demanda».
Distribución dispar La Coruña es la provincia que más proyectos aglutina, con 90; seguida por Pontevedra, con 88; Lugo, con 30; y Orense, con 6