Almeida toca la mayoría absoluta en Madrid y se asegura la Alcaldía
▶ El candidato del PP no necesitaría los votos de Vox y podría gobernar en solitario en el ayuntamiento ▶ Los populares absorben a Ciudadanos, que se queda en blanco, y casi duplican su resultado de 2019 Estimación de voto en elecciones municipales de Mad
José Luis Martínez-Almeida está muy cerca de la reelección como alcalde de Madrid, un objetivo que tenía en el aire hace apenas un año y que ha logrado consolidar en el esprint final de la legislatura. Según el último barómetro de GAD3 para ABC, el PP toca la mayoría absoluta en las elecciones municipales de la capital y aunque se quedara al borde de conseguirlo podría gobernar en solitario al no sumar la izquierda los votos suficientes para desbancarlo.
El vuelco político en la ciudad de Madrid, respecto al resultado de las elecciones locales de mayo de 2019, es espectacular. Es verdad que ahora no se presenta Manuela Carmena, que logró una popularidad considerable entre los madrileños y que ganó en las urnas hace cuatro años por ese tirón que tenía. Y ya se sabe que hasta el Papa Francisco ve a Almeida como «el heredero de la gran Manuela». Lo cierto es que el PP ha conseguido absorber prácticamente la totalidad del voto
Fuente: GAD3
perdido de Ciudadanos y ahora está en disposición de casi duplicar el resultado que obtuvo en las anteriores elecciones.
En el escenario político madrileño se observa un hecho relevante: la derecha está menos fragmentada, por la práctica desaparición de Ciudadanos, según los datos de GAD3, mientras que en la izquierda se produce una desmovilización que le hace retroceder en porcentaje de voto.
Si en 2019 el partido ganador fue Más Madrid, con Carmena como candidata a la reelección, en este caso es el PP el que se pone a la cabeza nada menos que con un 44,7 por ciento, 20,4 puntos más que cuatro años antes. Ese porcentaje de voto permitiría a los populares tener entre 28 y 29 concejales, de un total de 57. Como se ve, la mayoría absoluta no la tiene asegurada, pero con ese resultado lo que sí tendría garantizada Almeida casi con total seguridad es la Alcaldía.
Según la ley electoral, pueden ser candidatos a alcalde todos los concejales que encabecen sus correspondientes listas y si uno obtiene la mayoría absoluta de los votos de los concejales es proclamado electo. Si ninguno de ellos obtiene esa mayoría será proclamado alcalde el concejal que encabece la lista que haya obtenido mayor número de votos populares en el municipio.
El partido de Abascal y Ortega Smith se mantiene estable respecto a las elecciones de 2019, con un 7,6 por ciento de votos
El PP sumaría ahora mismo más concejales que toda la izquierda junta, y como parece bastante improbable que Vox fuera a respaldar al candidato del PSOE o de Más Madrid, Almeida sería proclamado alcalde por encabezar la lista más votada. De esa manera aleja por completo la posibilidad de una coalición con Vox y la negociación para conseguir sus votos, que sí necesitó en 2019 al no ser el PP la lista que más apoyos consiguió en las urnas. El dato es clave para la estrategia del PP y de Alberto Núñez Feijóo, empeñados en dejar claro que no quieren nada de Vox. Pero, además, cualquier mensaje triunfalista de Génova en la noche electoral pasaría por el mantenimiento de la capital y la Comunidad de Madrid, y a partir de ahí todo lo demás.
El partido de Santiago Abascal, con Javier Ortega Smith como candidato a la Alcaldía de la capital, se mantiene estable respecto a 2019, con un 7,6 por ciento de estimación de voto, una décima menos que lo que obtuvo en las urnas, y 4 o 5 concejales. Hace cuatro años se quedó en 4. Con estos datos se corroboraría que Ortega Smith no acaba de cuajar del todo en la política madrileña.
El tercer partido del centro-derecha que figura ahora mismo en el pleno municipal es Ciudadanos, que ha gobernado en coalición con el PP en el ayuntamiento y con Begoña Villacís como vicealcaldesa. La crisis de este partido, acentuada en Madrid, donde Villacís ni siquiera obtuvo el mínimo de avales exigible en su formación para ser candidata, ha dejado a Ciudadanos al borde del precipicio, quizás de forma definitiva.
En mayo de 2019, Ciudadanos, en horas altas todavía, fue el tercer partido de la capital, con un 19,2 por ciento del voto y 11 concejales. Tenía fuerza más que suficiente para negociar con el PP y exigirle una coalición, con la vicealcaldía incluida. Los populares, tras el batacazo que habían sufrido en las elecciones generales un mes antes con Pablo Casado como candidato a la presidencia del Gobierno, necesitaban la Alcaldía como agua de mayo, así como la Comunidad, y cedieron lo que hizo falta tanto en una administración como en otra.
Pero estos cuatro años han sido mortales para Ciudadanos, de crisis en crisis y siempre cuesta abajo, por no decir en caída libre, hasta llegar al punto en el que están. En Madrid capital, cae hasta el 2,8 por ciento y se queda fuera del ayuntamiento al no alcanzar el mínimo del 5 por ciento que marca la ley electoral. El batacazo es histórico y permite al PP llevarse el grueso de sus votos perdidos.
En la ciudad de Madrid no hay elecciones desde mayo de 2019, al contrario de lo que ocurrió en la Comunidad, donde Ayuso convocó en mayo de 2021 y tuvo una subida relámpago, hasta el 44,7 por ciento del voto. Curiosamente, es justo el mismo resultado que lograría ahora Almeida en la capital. El alcalde ha vivido una legislatura irregular. Pronto se le conoció por muchos como ‘el alcalde de España’ y su valoración se disparó sobre todo durante la pandemia. Sin embargo, cuando Casado le nombró portavoz del PP su popularidad empezó a bajar y llegó a su mínimo con la crisis de su partido, en medio del enfrentamiento entre Génova y Ayuso. Empezó a remontar al desmarcarse de la anterior dirección nacional y sumarse sin fisuras al proyecto de Feijóo.
Ámbito: autonómico (Comunidad de Madrid) y municipal. Procedimiento: telefónico.
Tamaño: 1.000 entrevistas (600 en municipio de Madrid).
Error muestral: +-3,2 por ciento. Fechas: 11-12 abril.