«Decidí sacar las obras de arte que mi padre no quería enseñar»
▶ Hija del reconocido pintor Paco Celorrio ‘Papartus’, con 30 años ha fundado dos empresas relacionadas con el arte y la moda
Estuvo 12 años viviendo fuera de España, se marchó con once años de Madrid para estudiar en un internado en Inglaterra, luego vivió en París, Dubái, Estocolmo y Suiza: «Pensé que me iba un año a estudiar fuera y acabé estando doce». Estudió Administración de Empresas y un máster en Diseño de Moda.
Arena tenía claro que todo lo relacionado con el arte, ya que lo había mamado en casa gracias a su padre: «Desde pequeña iba a su estudio a pintar con él. Parte de lo que soy, la creatividad y la manera de ver las cosas son gracias a él».
Papartus durante un periodo largo decidió dejar de exponer sus obras, aunque seguía pintando: «Yo iba al estudio y me fascinaban las maravillas que había ahí, pero él no quería que nadie entrara. Ahí es cuando decidí que yo sacaría sus obras». Este fue el paso definitivo para hacer que esta joven juntara sus raíces con lo que más le gusta, la moda, creando una marca de ropa: «La idea era sacar el arte de los estudios y llevarlo a la calle».
Cada colección que saca está basada en un artista diferente. «Todo funciona depende de lo que se quiera involucrar el artista en el proceso, cojo fragmentos de sus obras y los adapto haciendo estampados», añade. Ha hecho colecciones con cuadros de su padre, Míster Piro y Marina Vargas entre otros. Los diseños son completamente producidos en Madrid con patronistas de toda la vida «me preocupo mucho de que todo sea ‘made in Spain’», sus diseños son exclusivos y con producciones muy limitadas. El precio medio ronda los 350 euros.
Este original proyecto le ha llevado a recibir solicitudes de colaboración con grandes marcas, como la campaña que hizo junto a Toyota: «Fue una superexperiencia, me llamaron para diseñar un coche, encajaba totalmente con mi visión de sacar el arte a la calle». Utilizó de inspiración una colección de cerámica que hizo junto a su padre durante el confinamiento y que era el único arte que todavía no había visto la luz. «Hicimos esta colección en vez de sacar ropa de casa como todo el mundo, hicimos algo para casa, pero mucho más artístico. Diseñé el coche como una cerámica enorme».
Así surgió su siguiente proyecto: «Las personas al ver mis diseños estaban interesadas en ver los cuadros de donde salía mi inspiración y muchas veces acababan comprándolos», por eso decidió montar una galería de arte. Empezó con el nombre Arena Martínez Proyects hasta que dio el salto a Arma Gallery. «Mi galería funciona de una forma poco habitual, me centro en ferias de arte sobre todo y distintos espacios que se adapten a lo que quiere transmitir el artista con su obra, dando al cliente y al espectador una experiencia diferente en cada exposición». No tiene un espacio a pie de calle, sino un lugar donde comparte el arte y sus diseños bajo cita previa. Gracias a las ferias de arte ha conseguido mucha visibilidad: «Allí están los potenciales clientes y la gente a la que verdaderamente le gusta el arte».
Se ha dicho toda la vida que ser artista es una profesión complicada y frustrante, si te sale bien llegas a ser grande, pero si te sale mal no podrás vivir del arte. Arena tiene la gran suerte de poder vivir de él. «En el camino me he encontrado mil piedras. Es muy complicado emprender y más estando sola, me costó mucho cuando a los 24 años empecé con la marca, he aprendido más que haciendo cualquier máster».
Su próximo proyecto es con la artista mallorquina Elena Gual, una pintora muy característica, muy joven y con mucho tirón. Todo lo que hace Elena es con espátula, tuvo una reacción a la trementina y tuvo que dejar de pintar con pincel. El 7 de septiembre será su primera exposición individual que será en el Retiro de Madrid, el 6 de junio, desde las 15.00 horas hasta las 21.00 horas: «En el monumento que hay detrás del lago, va a estar Elena pintando retratos a personas que se ofrezcan». Esto será para una colección dentro de la exposición que se va a llamar ‘People of Madrid’. Serán expuestos con el nombre y apellido de las personas que pinte.