Brad Pitt gana la última batalla por el Château Miraval a Angelina Jolie
Isabel II quería que Lady Di se casase con el Príncipe Andrés
Parece mentira que hace más de una década, Brad Pitt y Angelina Jolie, fueran uno de los matrimonios más sólidos de Hollywood . Desde entonces, de su relación no quedan más que los escombros y seis hijos en común. Sus batallas son continuas pero la que más quebraderos de cabeza les está dando es la lucha por intentar quedarse con el Château Miraval. La mansión, valorada en 30 millones de dólares, es famosa por su viñedo y porque fue el escenario de la boda de la expareja en 2014. La base del problema reside en que ambos habían acordado previamente que nunca pondrían a la venta su parte sin el consentimiento de la otra persona, algo que la estrella de Maléfica incumplió. Pitt descubrió a través de los medios de comunicación que Angelina se había deshecho de su fracción del Château Miraval, que era del 50%. Recientemente, el actor ha ganado una victoria en los tribunales, argumentando que debería tener una participación mayoritaria en el viñedo después de la venta de Jolie. El tribunal de Luxemburgo ha determinado provisionalmente que el 10% de la participación vuelva a Pitt hasta que haya un fallo final, lo que le otorga el control de la propiedad por ahora.
Un nuevo libro atormenta a la Familia Real británica. En ‘My mother and I’ (’Mi madre y yo’), escrito por la periodista Ingrid Seward y que verá la luz la semana que viene, se desvelan detalles hasta ahora desconocidos en la relación entre Isabel II y su hijo, Carlos III de Inglaterra. El diario británico ‘Mirror’ adelanta parte de su contenido y desliza que la monarca británica quería que Lady Di se casase con el Príncipe Andrés y no con el sucesor al trono, como finalmente ocurrió: «La Reina, alerta ante una posible nueva mujer en la vida de su hijo, se preguntaba si alguien tan joven podría diferenciar entre el hombre y el príncipe. Y no pudo evitar pensar que la chica Spencer se adaptaría mucho mejor a su hijo menor».
Cada vez son más los famosos que alzan su voz para concienciar a la población sobre el peligro de las adicciones. Ahora, a sus 65 años, Jamie Lee Curtis ha irrumpido en Instagram para celebrar que lleva un cuarto de siglo sin consumir opeáceos. «25 años limpia. Lo que hay dentro es una sensación de calma, serenidad, propósito y el mayor sentimiento de que no estoy sola. Muchos otros comparten la misma enfermedad y la misma solución». Así mismo, ha querido mandar un mensaje de apoyo y esperanza a los que viven una situación similar: «Aquí fuera hay otros que se preocupan. Mi mano en la tuya. Nuestras manos en las tuyas».