Fracasa la formación del Gobierno de extrema derecha en Holanda
▶ Omtzigt, líder de uno de los partidos que negocian una coalición, denuncia la ocultación de datos económicos
Las negociaciones para la formación de un nuevo Gobierno holandés han entrado en una fase extremadamente peligrosa, después del inesperado anuncio de Pieter Omtzigt de dar por fracasadas las gestiones hechas hasta ahora para cerrar una coalición de cuatro partidos en torno al radical populista e islamófobo Geert Wilders, que fue el ganador de las elecciones anticipadas de noviembre del año pasado. Omtzigt, que dejó el partido democristiano para fundar el Nuevo Contrato Social (NSC), dijo que estaba «consternado» al enterarse de los «riesgos y reveses financieros reales» descritos en los documentos que se barajan en las negociaciones para formar la coalición y que, según afirma, le habían sido ocultados. Wilders por su parte publicó en redes sociales un mensaje en el que afirma que la situación es «increíble y decepcionante», dado que «los holandeses quieren este gabinete y Pieter Omtzigt está tirando la toalla».
Las conversaciones estaban girando en torno a una coalición que incluiría al PVV de Geert Wilders, el liberal VVD del primer ministro saliente Mark Rutte y el partido de los agricultores, BBB. Sería la primera vez que un político heterodoxo y provocador como Wilders entraría en el Gobierno de los Países Bajos después de más de una década de ser contemplado como una amenaza para las instituciones democráticas.
El actual líder del VVD, Dilan Yesilgöz, aseguró que estaba «muy sorprendido» y pidió que Omtzigt volviera a sentarse a la mesa, mientras que Caroline van der Plas, la responsable del partido de los agricultores, que acaba de aparecer en el panorama político del país con gran empuje, calificó la situación de «sorpresa total».
El socialdemócrata Ronald Plasterk, el ministro del Interior en funciones que es el encargado de ayudar en las negociaciones y al que Omtzigt acusa de haberle ocultado la información sobre las consecuencias económicas del programa que se estaba pactando, se declaró «muy sorprendido» por la ruptura de las negociaciones «que hasta el martes por la tarde habían sido muy constructivas» y que consideró «algo confusa» la argumentación del líder del NSC.
El próximo lunes está previsto que se celebre un debate parlamentario sobre la situación política y en él se espera que se ventilen los datos económicos que han causado la ruptura de las negociaciones.
«Promesas vacías»
En una carta a los 20 diputados de su partido, Omtzigt criticó a Plasterk por no compartir los informes de los ministerios sobre la situación de las finanzas del país, que según él tenía desde hace dos semanas y no los comunicó a los negociadores, a pesar de que la economía ha sido uno de los principales temas de discusión entre los partidos que intentan formar una coalición. Esos informes establecen «expectativas financieras diferentes» y su partido «no quiere hacer promesas al pueblo holandés sabiendo de antemano que estas promesas vacías no podrán cumplirse».
Omtzigt ha llegado a decir que su formación todavía estaría dispuesta a apoyar una «coalición amplia» en el Parlamento, pero que no se uniría a un gabinete con los otros tres partidos con los que negociaba.
Plasterk tendrá que decidir ahora si celebrar una segunda ronda de conversaciones con los tres partidos restantes para formar un gabinete minoritario, invitar a otro partido (que según algunas versiones podría ser muy probablemente la alianza de izquierda GroenLinks-PvdA) para intentar formar una coalición de gobierno o declarar que las negociaciones son imposibles, lo que provocaría nuevas elecciones, algo que de momento todos excluyen, teniendo en cuenta que han pasado menos de tres meses desde que se celebraron las últimas.
Omtzigt es un político peculiar. Fundó su propio partido político despechado por no haber logrado la dirección de los democristianos tradicionales y prometió que aunque ganase las elecciones no sería candidato al puesto de primer ministro. Por su parte, Rutte sigue ejerciendo como primer ministro en funciones mientras se ofrece para un puesto internacional.
Las elecciones anticipadas se celebraron en noviembre pero los partidos no han logrado salir del bloqueo tres meses después