El Príncipe de Gales, en un gesto inédito en la realeza, llama a poner fin al conflicto en Gaza
▶ El hijo de Carlos III y heredero al Trono se pronunció a través de un comunicado
En una significativa intervención sobre el conflicto en Gaza, el heredero al Trono británico hizo público ayer un comunicado en el que confesaba estar «profundamente preocupado por el terrible costo humano del conflicto en Oriente Próximo desde el ataque terrorista de Hamás el 7 de octubre», en el que «demasiadas personas han perdido la vida».
«Yo, al igual que muchos otros, quiero ver el fin de los combates lo antes posible», aseguró el Príncipe de Gales, en un texto en el que continuó diciendo que hay «una desesperada necesidad de un aumento en el apoyo humanitario a Gaza». «Es crucial que la ayuda llegue y que los rehenes sean liberados», afirmó en unas declaraciones inusuales, ya que, en general, los miembros de la realeza británica evitan hacer comentarios políticos.
«Paz duradera» en la región
«A veces, sólo cuando nos enfrentamos a la escala abrumadora del sufrimiento humano, se comprende la importancia de la paz permanente. Incluso en la hora más oscura, no debemos sucumbir al consejo de la desesperación. Continúo aferrándome a la esperanza de que se pueda encontrar un futuro más brillante y me niego a renunciar a eso», detalló, dejando claro su compromiso con «la resolución pacífica del conflicto». Las palabras del Príncipe Guillermo, hijo mayor del Rey Carlos III, son notables por parte de la realeza británica sobre la situación, y resuenan como un eco de su visita a Israel y Palestina en 2018, cuando fue el protagonista del primer viaje oficial de un miembro de la monarquía a Israel y Cisjordania. En aquel momento, hizo referencia a la necesidad de la búsqueda de una «paz duradera para la región»» en sendos encuentros con Benjamín Netanyahu, primer ministro israelí, y Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina.
El comunicado de ayer se hizo público antes de su encuentro en la sede de la Cruz Roja Británica en Londres con trabajadores humanitarios que han estado en la Franja, y de que la próxima semana participe en una conversación en una sinagoga con jóvenes activistas contra el odio, tras los informes de que el antisemitismo ha aumentado significativamente durante el desarrollo del conflicto, que ya supera los cuatro meses. Por su parte, un portavoz del Palacio de Kensington declaró que «el Príncipe y la Princesa están profundamente preocupados por los eventos que se desarrollaron a finales de 2023 y continúan teniendo en sus corazones y mentes a todas las víctimas, sus familias y amigos», y agregó que «sus Altezas Reales siguen compartiendo la esperanza de un futuro mejor para todos los afectados». Los Príncipes de Gales ya habían condenado el «espantoso ataque terrorista de Hamás contra Israel» y advirtieron que ambas partes serían «perseguidas por el dolor, el miedo y la ira» mientras «Israel ejerce su derecho a la autodefensa».
El llamamiento del Príncipe llega además al mismo tiempo que Israel está a punto de invadir Rafah, una de las últimas zonas de la franja de Gaza que su Ejército aún no ha atacado con tropas terrestres.
Según la prensa local, el Príncipe Guillermo ha estado siguiendo de cerca los acontecimientos en Oriente Próximo, y tal es su inquietud por el impacto humano de la guerra, especialmente en los niños y jóvenes de ambas partes, que está buscando la manera de contribuir, desde su posición, al cese de las hostilidades.
El llamamiento del heredero se suma al del líder del Partido Laborista, Keir Starmer, que también pidió el pasado domingo el fin inmediato de los combates, diciendo que un bombardeo en Rafah «no puede ocurrir» y que la zona «no puede convertirse en un nuevo teatro de guerra». Hoy, los diputados votarán en la Cámara de los Comunes si respaldan los llamados a un alto el fuego inmediato.