El temporal deja vientos de 143 km/h y Galicia mantiene la alerta
Continúa la alerta por temporal en Galicia. Ayer, el paso de la borrasca ‘Louis’ volvió a definir la climatología, provocando tormentas en el litoral y dejando también fuertes vientos en áreas del interior; de forma destacada, llegó a provocar rachas de más de 143 kilómetros por hora en el municipio orensano de Manzaneda. Hoy, la Comunidad prevé mantener la alerta naranja por temporal costero y la amarilla por lluvia y viento.
A lo largo del día, continuará activo un aviso amarillo por viento en el mar de componente oeste, fuerza siete, con intervalos de fuerza ocho, especialmente en las áreas del litoral norte; en la costa, podrán llegar a verse olas de entre cinco y seis metros de altura, según recogió Ep.
Por otro lado, el interior de Pontevedra, el noroeste de La Coruña, y las montañas de Orense y de Lugo permanecerán en alerta amarilla debido a ráfagas de viento que rebasarán los 80 km/h.
De acuerdo al pronóstico de MeteoGalicia, debido a la entrada de un nuevo frente en el territorio, hoy predominarán los cielos con abundantes nubes y las lluvias, que comenzarán siendo «intermitentes al principio, pero que serán persistentes y generalizadas durante las primeras horas de la tarde». Sin embargo, también se prevé que la cota de nieve baje durante la noche hasta los 900-1.000 metros y que las temperaturas sufran un ascenso entre ligero y moderado.
La nieve se dejó ver ayer tanto en la montaña lucense como en Orense, con mínimas que alcanzaron los -4,8 grados en el municipio orensano de A Veiga, y máximas de 14,2 en Bueu (Pontevedra). Debido a las nevadas, la Dirección General de Tráfico (DGT) difundió ayer un aviso de precaución al circular por la A-6 a su paso por As Nogais y Pedrafita do Cebreiro (Lugo) y en la LU-633, desde el kilómetro 0 de Pedrafita hasta el 26 de Ramil, en ambos sentidos.
Precisamente, en la montaña lucense, la Guardia Civil ayudó ayer a sacar varios coches en Pedrafita que se habían quedado atrapados; y, en Orense, un dispositivo agentes de la Benemérita auxilió a una familia que también había quedado aprisionada, aproximadamente, a unos dos kilómetros de la estación de Manzaneda.