La Airef advierte a los partidos de que España afronta un ajuste de 10.000 millones al año
▶ Augura un proceso de consolidación fiscal que se dilatará entre cuatro y siete años
Un ajuste fiscal de entre 7.500 y 10.000 millones de euros cada año y durante un periodo que se puede prolongar entre cuatro y siete años. Eso es lo que le espera a las administraciones públicas españolas en el futuro más inmediato una vez entren en funcionamiento de forma definitiva las nuevas reglas fiscales que regirán para los veintisiete países de la UE.
Así lo deslizó la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) hace unos días en la última actualización de su observatorio fiscal y así se lo trasladó en privado la presidenta del organismo fiscalizador de las cuentas públicas, Cristina Herrero, y a los portavoces de los diferentes grupos parlamentarios representados en la Comisión de Hacienda y Función Pública del Congreso el pasado martes, según reveló ayer el portavoz económico de Sumar, Carlos Martín Urriza, en su intervención en el debate sobre la senda de consolidación fiscal de España para 2024-2026.
El país encara un ajuste fiscal sin precedentes y la Autoridad Fiscal ha querido hacer conscientes de ello a los representantes de la soberanía popular, que según reveló ayer el portavoz de Sumar desde el pasado martes saben que el país tendrá que aligerar en 37.000 millones de euros su desequilibrio fiscal en los próximos años, ya sea a golpe de subidas de impuestos o de reducir el gasto.
Europa obliga. Las reglas fiscales europeas exigen a los países situar su déficit público por debajo del 3% del PIB y asegurar una reducción progresiva pero inexorable de sus niveles de endeudamiento cuando estos se sitúen por encima del 60% del PIB. España
EL AJUSTE QUE ESPERA
Desde este mismo año y hasta, como poco, 2028, el sector público español deberá reducir su déficit a razón de entre 7.500 y 10.000 millones al año, según los cálculos de la Airef. Un ajuste sin precedentes en los últimos años.
El escenario inercial estimado por la Autoridad Fiscal en ausencia de ese ajuste extraordinario dejaría el nivel de deuda pública en el entorno del 105% del PIB a la altura de 2028 y la dispararía hasta el 114% una década después.
La inercia de las cuentas públicas españolas impediría rebajar el déficit por debajo del umbral del 3% según la Airef, al contrario de lo que ha venido previendo el Gobierno, y llevaría el desequilibrio de las cuentas públicas hasta el 4% de aquí a 2033.
va a entrar en el nuevo marco fiscal con un déficit de alrededor del 4%, respecto al 3% en que se situaba justo antes de la sacudida económica de los últimos años; y con una deuda pública del 107,7% del PIB, por debajo de la previsión oficial para 2023 y 17 puntos inferior al pico del 125,3% que se alcanzó en 2020, pero más de nueve puntos por encima del 98,2% en que se movía en el año 2019, según recordaba el Observatorio de Deuda de la Airef hace unos días.
Esa sobrecarga fiscal generada durante la pandemia y la gestión de la crisis inflacionista, muy superior a la generada en el resto de grandes economías europeas, es la que ahora toca purgar. Y va a exigir un esfuerzo considerable. Según la Airef, el sector público tendrá que abordar un ajuste fiscal del 0,64% del PIB anual (alrededor de 10.000 millones) en el periodo 2025-2028, que bajo determinadas condiciones podría ser algo más suave, del 0,49% del PIB (unos 7.500 millones), pero que en este caso sería más prolongado, durante siete años.