El delegado del Gobierno no ve «daño real» con los trenes Avril
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, se enrocó ayer en que el Ejecutivo ya tiene abierto un procedimiento para reclamar daños y perjuicios a Talgo por «incumplimiento» de contrato, ante una nueva demora en la entrega de 15 trenes de la serie 106, los denominados Avril. Y que, no existiendo una figura de «daño genérico», no ha lugar a arbitrar fórmulas para compensar a Galicia, una de las regiones que siguen a la espera de estos trenes, indispensables para que la alta velocidad vaya más allá de Orense.
A Blanco, que se reunió con el presidente de la Fegamp, Alberto Varela, se le preguntó concretamente por la carta remitida por la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade en funciones, Ethel Vázquez, al ministro de Transportes, Óscar Puente, reclamando la creación de un grupo de trabajo con Talgo, para hacer seguimiento, y abordar compensaciones a los gallegos. Su réplica dejó manifiestamente clara la postura del Gobierno: «No veo exactamente cuál es ese daño, entre comillas, real, más que ese mal a los ciudadanos», a los que se les retrasa la posibilidad de viajar en los Avril, un «daño moral», entendiendo que, como usuarios, «nos podemos sentir de alguna forma perjudicados». «Tendrá un recorrido pronto», dejó caer sobre unos trenes que ya se esperaban en 2022. Por lo demás, reivindicó que «Pedro Sánchez trajo el AVE a Galicia»; y dijo que «ni el PP ni la Xunta son los más indicados para decir que este retraso genera un daño», porque, atacó, no tiene «parangón» con el tiempo que tardó la conexión con la meseta.