Comercio, hostelería y actividades administrativas, los sectores que más empleo perderán por la IA
▶ La inteligencia artificial destruirá en España 400.000 puestos de trabajo netos en una década Sectores con más impacto de la IA
Si nada cambiase de aquí a los próximos diez años en el mercado laboral español, la inteligencia artificial destruiría 400.000 puestos de trabajo netos. En total, se automatizarían unos 2.000.000 de empleos y se crearían 1.600.000. Además, para el 15% de los casos, aumentaría la productividad. Así lo indica el último informe de Randstad ‘IA y Mercado de Trabajo en España’, que estudia la influencia que tendrá esta tecnología en el empleo en 2033. El impacto, sin embargo, no es homogéneo. Algunos sectores saldrán beneficiados, con un aumento de productividad, mientras que otros verán cómo el trabajo que hacen día tras día se ve automatizado y recortarán los puestos de trabajo.
Según el informe, los sectores más perjudicados en términos de empleo serán el comercio –con 158.415 empleos menos–, las tareas administrativas –con la pérdida de 147.915– y la hostelería –112.770–. Pero, ¿qué hace que los empleados de estos sectores sean los más susceptibles a ser remplazados?
«El comercio es el más expuesto de todos. Cuando pensamos en este sector nos imaginamos la tienda de la esquina, pero lleva en transición muchos años. La proporción de comercio electrónico frente al físico es todavía pequeña y tie
Industria alimentaria y textil
Agricultura, ganadería y pesca
Actividades artísticas y entretenimiento
Servicios de cuidado, bienestar y reparación autónoma, sin personal en recepción. También hay restaurantes en los que te atienden robots, que con la IA potenciarán sus habilidades y serán capaces de recomendar platos en función de dieta, intolerancias, etc. Cada vez irá a más» detalla. Asimismo, añade que las nuevas tecnologías harán que el sector evolucione y recuerda que en hostelería «no solo hay actividades de cara al público». Otro tipo de empleos que hay detrás de las grandes empresas hosteleras «también se automatizarán».
Administración desfasada
El dato de destrucción de empleo en tareas administrativas contrasta con el de la Administración Pública. Mientras que en la primera se espera la pérdida de casi 150.000 puestos, en la segunda se crearán unos 14.600 de aquí a 2033. Esto, tal y como resume Bote, se debe a que «en términos de aplicación de tecnología, la Administración está mucho menos avanzada e implementa los cambios mucho más tarde que la empresa privada. Va con mucho desfase. Es una cuestión de privacidad y presupuesto». Las tareas administrativas –segundas en destrucción de empleo– automatizarán un 18% de sus puestos de trabajo, la tasa más alta del estudio. En el ámbito público, sin embargo, «habrá poco impacto, al menos de momento».
El director ejecutivo de Ingram Micro Iberia, empresa de distribución de soluciones de tecnología, apunta que, en el sector privado, se robotizarán las actividades «más monótonas y repetitivas» y agrega que, en su opinión, «esto dará mas tiempo a los empleados para dedicarse a las tareas de alto valor añadido». Por ejemplo, asegura que algunas de las habilidades relacionadas con el trabajo de administrativo no pueden ser sustituidas por la IA. Menciona que todo trabajo que involucre contar con pensamiento crítico, empatía, innovación y capacidad de persuasión será realizado por humanos, ya que la inteligencia artificial «no tiene esas capacidades».
¿Más productividad?
Sí y no. El aumento de la productividad se verá, sobre todo, en las grandes empresas. Estas son las que tienen capacidad económica para la inversión inicial, por lo que también serán las que vean un incremento de producción. En este sentido, Bote recuerda que en nuestro país, el 90% del tejido empresarial está formado por pymes y micropymes, y comenta que «las pequeñas empresas normalmente esperan a que una tecnología se consolide y se abarate antes de aplicarla». Así, el experto asegura que, aunque la inteligencia artificial sí supondrá una nueva revolución tecnológica, en el corto plazo «no solucionará el problema de productividad de nuestro país».
Desde Randstad explican que el saldo negativo en el empleo en la próxima década como consecuencia de la IA se revertirá. «Al final, derivará en un abaratamiento de costes y, por tanto, más producción y más empleo. Pero habrá que esperar más de diez años para que eso pase», concluye Bote.