«Los alumnos no están acostumbrados a tener deberes y tienen graves dificultades para leer»
▶ Familias de una escuela de Barcelona fuerzan la caída de la dirección por el «bajo nivel educativo»
«Desconocemos, pese a haberlo reclamado en diversas ocasiones, el plan de estudios de la escuela; los alumnos no están aprendiendo métodos de estudio para prepararse para los exámenes; no están acostumbrados a tener deberes; en sexto de Primaria aún trabajan las tablas del 2, 3 y 4 y solo hacen comprensión lectora cada 15 días, y los alumnos de segundo de Primaria presentan graves dificultades a la hora de leer». Amparados en estas y otras muchas quejas detalladas en un extenso documento al que ha tenido acceso ABC, las familias de la escuela Andreu Castells de Sabadell (Barcelona) han forzado la dimisión en bloque del equipo directivo. Es un caso sin precedentes que demuestra el malestar que hay en las escuelas e institutos por los nuevos métodos de aprendizaje.
Los padres de este centro llevaban años quejándose del «bajo nivel educativo» de los alumnos y de la gestión de la dirección. En un extenso documento que cerraron en noviembre de 2023 la Asociación de Familias de Niños (AFI por sus siglas en catalán) del
Andreu Castells dio un golpe sobre la mesa y exigió cambios urgentes en la dirección del centro, del que, según indican las familias en su comunicado, salen cada curso unos doce profesores. En su documento, los padres reproducen la carta de uno de ellos. La docente denuncia «el control excesivo» de su trabajo por parte de la dirección de la escuela. «No podíamos encargar deberes, ni hacer que los alumnos escribieran textos largos», dice la profesora, que explica que la dirección hacía incluso el vacío «a los docentes que no compartían sus ideas educativas». La AFI denuncia también la inacción del centro ante situaciones graves y la «falta de empatía hacia el idioma materno de las familias».
Traductores en las reuniones
«Los profesores estábamos obligados a hablar en catalán a las familias que no lo entienden o tienen dificultades para entenderlo, pese a que la dirección sabe que es un colegio plural con familias de procedencia diversa», señalan las familias en su listado de quejas. Añaden en este sentido que «en diferentes reuniones, la responsable de estudios se ha negado a cambiar de idioma, aunque se le haya pedido específicamente, e incluso ha sido capaz de proponer en medio de una reunión que las familias que no entienden el catalán se compren traductores». La presión y las críticas de las familias de los alumnos de la Escola Andreu Castells de Sabadell han acabado finalmente con la dimisión en bloque del equipo directivo.
El caso estalló en enero cuando los tres miembros de la dirección de la escuela decidieron pedir la baja médica en bloque por las críticas reiteradas de las familias. Los alumnos del centro llegaron a su casa con una escueta nota de la dirección dirigida a sus padres en la que les informaba de que todo el equipo directivo cogía en bloque la baja y que la Inspección Educativa tomaba el mando.
«Os comunicamos que el equipo directivo de la escuela ha cogido la baja. Desde la Inspección Educativa nos están orientando en la organización y gestión del centro para mantener su funcionamiento normal», indicaban a las familias. La Consejería de Educación, que dirige Ana Simó, intervino el centro y la inspección educativa asumió la dirección. Finalmente, el pasado 4 de marzo, el equipo directivo que estaba de baja comunicó que no volverá a la escuela. Según han apuntado fuentes próximas al centro, el conflicto entre las familias de la escuela Andreu Castells y el equipo directivo empezó en 2019. «Durante todos estos años los padres han protestado contra la dirección porque consideran que el nivel educativo que reciben sus hijos no es el adecuado». Las mismas fuentes denuncian que «cada año dejan la escuela una decena de docentes», pero la Generalitat asegura que no le constaba ese malestar.