Rueda ve «imposible», sin Presupuestos, abordar la financiación autonómica
▶ El titular de la Xunta en funciones insiste en que la falta de cuentas supone un varapalo para las regiones
APedro Sánchez «no le interesa» reunir a las comunidades autónomas para abordar un nuevo modelo de financiación autonómica; y ese melón que nunca se abre seguirá marchitándose, porque, sin Presupuestos Generales del Estado este año, es «muy difícil adquirir compromisos de distribución de recursos». «Supongo que ahora será imposible», apostilló ayer Alfonso Rueda, autor de estas reflexiones. El presidente de la Xunta en funciones se desplazó a Madrid para participar en un desayunocoloquio organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), en colaboración con Abanca. En el Palace, arropando a Rueda, estuvieron Cuca Gamarra, secretaria general del PP; Miguel Tellado, portavoz parlamentario; y los diputados gallegos Francisco Conde –exvicepresidente primero con Rueda– y Ana Pastor. Al contexto, las políticas y retos económicos de Galicia, pronto lo desbordó la actualidad.
Especialmente con decisiones que afectan tan de lleno, y «muy negativamente» a las comunidades autónomas. Rueda vino un poco a hablar en nombre de todas –las del PP, al menos– cuando denunció la repercusión que tendrá tanto la decisión de Sánchez de centrarse ya en los PGE de 2025, como el previsible aplazamiento (de nuevo) de la financiación de las regiones. Sobre los Presupuestos, insistió en lo que ya dijo el pasado jueves, tras la reunión del Consello: ni es «normal» ni se imagina Galicia sin Orzamento, porque «no se puede funcionar». No es el caso de Sánchez, que «de rebote» los descarta porque en Cataluña no se consiguen aprobar y van a elecciones anticipadas. Auguró que Sánchez tirará de decretos para beneficiar a quien considere; mientras regiones como Galicia verán afectadas transferencias e infraestructuras pendientes –gratuidad de AP-9, alta velocidad ferroviaria, Corredor Atlántico, etc–. A la espera de confirmar si pone en «riesgo» las transferencias a cuenta –no hay información del Gobierno–.
El efecto mariposa no se acaba ahí. A Sánchez ya no le apasionaba la idea (lo dijo con otras palabras Rueda) de sentarse con los presidentes autonómicos para hablar de financiación de los servicios públicos, porque «lo primero» que le trasladarían es que ha de «cortar de raíz» las «bilateralidades que ahora mismo lo están sosteniendo en Moncloa»; «stop a esas cosas». Preguntado por el modelo en sí, Rueda reconoció, como ha hecho otras veces, que «todos» deberán «ceder», y que ninguna autonomía puede aspirar, «al cien por cien», a su «objetivo ideal». Porque Galicia quiere el acento en dispersión y envejecimiento y Madrid, por ejemplo, en volumen de población. Pero destacó un punto de partida: la declaración de Córdoba, que mostró que es posible entenderse desde «intereses muy distintos».
Rueda buscó seducir a su auditorio, con preponderancia empresarial, presumiendo de los logros que atribuyó a una política «sensata», y sobre todo la «estabilidad», que garantiza a las compañías que su interlocutor es serio, no va a «romper las reglas a mitad de partido», porque «no está a expensas» de sus socios. En la Xunta tendrán un «amigo de los que mueven la economía», que «abre los brazos» a las inversiones, agilizando trámites, apostando por la «colaboración público-privada».
En paralelo, avanzó que entre sus «prioridades» figuran «blindar los servicios públicos» y que Galicia sea «protagonista de muchas de las decisiones que se tomen a nivel estatal».
Conselleiros «políticos»
Ni en Madrid abandonó Rueda el hermetismo con el que le sigue «dando vueltas» a su gobierno, aunque sí dejó algunas pinceladas. Refrendó que hará «algún cambio de estructura», y apuntó que los «compromisos» que ha adquirido «exigen pensarse muy bien» a quienes los han de «ejecutar». En la mente de todos, áreas como la vivienda, que ya avanzó que verá reflejada organizativamente su relevancia.
Más interesante aún resultó que dijera que un conselleiro «tiene dos facetas»: «tienen que ser gestores, pero también tienen que ser políticos; los puestos políticos son para ejercer la política, en esa combinación estoy». La nombró, como ejemplo del primer retoque, pero no reveló que tal vez por ahí se entienda que haya prescindido de Ethel Vázquez en Infraestruturas.