La Comisión Europea mantiene su oferta para mediar sobre el CGPJ sin Reynders
▶ «No hay más reuniones programadas», explica el Ejecutivo de la UE tras cancelarse la prevista hoy en Madrid
El comisario de Justicia, Didier Reynders, ha solicitado formalmente una excedencia como miembro de la Comisión Europea al haberse convertido en candidato oficial para ser el secretario general del Consejo de Europa, institución que no pertenece a la UE. Se espera que en las próximas horas la presidenta de la Comisión, Ursula Von der Leyen, anuncie que acepta esta petición y muy probablemente también quién es el comisario que se va a hacer cargo de la cartera que ocupa Reynders.
En esta situación, parece totalmente imposible la participación del liberal belga o de su sustituto en la intermediación europea con PSOE y PP para la renovación y reforma del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el marco de la cual hoy mismo se debía celebrar otra reunión a tres bandas, esta vez en Madrid. Reynders necesita, entre otros, el voto del Gobierno español para alcanzar el cargo de mayor responsabilidad en el Consejo de Europa, por lo que sería totalmente inapropiado que participase en unas negociaciones en las que pudiera parecer que se ve condicionado. En todo caso, el Ejecutivo comunitario reconoce que «hay discusiones entre las partes» sobre el futuro del proceso y que «sigue disponible» para ayudar a llegar a un acuerdo.
La Comisión Europea había asumido, no sin ciertos reparos, esta misión inédita de mediar entre dos partidos políticos de un país miembro, que es un terreno que no le gusta pisar porque rebasa claramente sus competencias y, si tuviera que hacer lo mismo en los otros 26 Estados de la UE, no tendría tiempo para otra cosa.
Fuentes comunitarias han restado importancia a la circunstancia de que esta mediación de la Comisión Europea se planteó con el horizonte de una duración de dos meses. «No tenemos nada que decir sobre cuales pueden ser los próximos pasos, salvo que en este momento no hay reuniones programadas. Cuando haya algo que anunciar, así lo haremos».
Aunque no hay una regla fija, se espera que Von der Leyen anuncie al mismo tiempo que acepta la petición de Reynders y el nombre de la persona que se hará cargo de sus responsabilidades durante este periodo de interinidad. En principio, aunque inactivo, el belga seguirá siendo comisario hasta que en junio se resuelva la decisión de elegirlo o no a la cabeza del Consejo de Europa. En ese momento debería dimitir y el Gobierno belga estará obligado a nombrar a otro comisario para lo que resta de mandato, que concluye el 1 de noviembre.
Aparentemente, la opción más probable es que Von der Leyen decida transferir las competencias de Reynders a la vicepresidenta Vera Jourova, que se encarga de Valores y Transparencia y que tiene en su órbita la cuestión del Estado de derecho. Es checa y políticamente pertenece –como Reynders– a la familia liberal, por lo que no tiene vinculación con ninguno de los dos partidos españoles que están intentando pactar el fin del bloqueo del órgano de gobierno de los jueces.
La cuestión que también queda en suspenso es saber quien firmará el informe sobre el Estado de derecho que la Comisión realiza cada año y en el que deberá aparecer la crítica por la falta de renovación de los miembros del CGPJ pero también se censura que se mantengan las reglas de elección por parte del Parlamento y no por los mismos jueces al menos para la mitad de los 20 vocales de este órgano. Igualmente se repetirán las críticas por la falta de independencia de la Fiscalía General. Lo que no está claro todavía es cómo recogerá las conclusiones de la Comisión de Venecia sobre la ley de amnistía.
El actual presidente del CGPJ, Vicente Guilarte, vinculó su continuidad a que «los buenos oficios» del comisario Reynders permitieran desbloquear la negociación entre PSOE y PP en estos dos meses, ya que de lo contrario anunció que dejaría su puesto al frente del CGPJ. En ese caso, sería el tercer presidente en funciones que lo deja tras expirar el mandato a finales de 2018: Carlos Lesmes, dimitió a finales de 2022 por la misma razón y su sustituto, Rafael Mozo, se jubiló el verano pasado.
Hasta ahora, el comisario Reynders, el ministro Félix Bolaños (PSOE) y el popular Esteban González Pons se habían reunido tres veces desde finales de enero. La última fue en el Parlamento Europeo, en Estrasburgo (Francia), hace dos semanas. Entonces, los dos españoles estuvieron de acuerdo en una próxima reunión en Madrid, sabiendo que coincidía con la Semana Santa, que no es festivo en Bruselas.
Los dos candidatos que optan al mismo puesto que Reynders son el expresidente suizo Alain Berset y el exministro de Cultura estonio Indrek Saar. Reynders cuenta con el apoyo del Gobierno belga en su segundo intento para ocupar este puesto y se considera que es el que tiene mas posibilidades. En caso de que sea elegido, dimitirá como comisario, lo que obligará al Gobierno belga a designar a un sustituto y a Von der Leyen a reorganizar las carteras de la Comisión Europea.
Lo más probable es que la vicepresidenta de Valores, la checa Jourova, asuma las competencias que deja su compañero belga
Bruselas insiste no obstante en que sigue habiendo «discusiones entre las partes» para desbloquear este órgano