El TSXG confirma la condena para el hermano de Toques que quemó a un vecino
▶ Ratifica que las grabaciones de las conversaciones tras el crimen son válidas
Apenas diez folios han servido para devolverle la tranquilidad a los vecinos de la localidad coruñesa de Toques que llevan años denunciado la agresividad y las amenazas por parte de los hermanos Carreira. Tras el crimen de Julio Lea, asesinado a las puertas de su casa y quemado después en un monte próximo, todas las miradas se dirigieron hacia Manuel y Marcial por la más que conocida mala relación que mantenían con la víctima, a cuyo padre ya habían enviado al hospital de una paliza. La investigación de la Guardia Civil confirmó las sospechas y los dos hermanos y su primo fueron procesados por el crimen de Julio. Durante la vista oral, sin embargo, el juez entendió que no había pruebas consistentes en contra de Manuel y lo absolvió antes incluso de que el jurado popular se retirase a deliberar.
En su veredicto, el tribunal ciudadano salvó también al primo y dirigió toda la culpa hacia Marcial, que hasta ahora seguía en libertad a espera de que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia resolviese los recursos contra la sentencia que lo condena a 14 años de prisión. Con el fallo en la mano, su futuro pasa por volver a la prisión en la que ya cumplió un año de preventiva. En Nogueira, el lugar en el que residían víctima y victimario, el miedo pervivía tras el juicio. Muchos de los vecinos tuvieron que declarar en la vista y reconocieron el clima de violencia que ejercían los Carreira, con varias agresiones que acabaron en ingresos hospitalarios. Incluso algunos de ellos confesaron que hubo gente que vendió sus fincas por no tener problemas con los hermanos y uno de los testigos manifestó que estuvo a punto de sacrificar a su perro cuando los acusados se quejaron porque ladraba demasiado y los molestaba. Con este ambiente enrarecido, la confirmación de la condena a Marcial supone cierto alivio para quienes los señalaron desde el primer día. En su fallo, el TSXG ratifica que las grabaciones que sirvieron para conocer las conversaciones de los sospechosos tras la muerte de Julio, en las que los agentes descubrieron amenazas a la mujer de uno de ellos, son procedentes. En estas escuchas, el condenado fue sorprendido amenazando su cuñada: «A ti hay que matarte, ahora todos a la cárcel por tu culpa. Te dijimos muchas veces que no cuentes la verdad porque no se puede contar» le dirigió.
Pero el tribunal tuvo en cuenta también otras pruebas en contra de Marcial, y todas ellas han sido reflejadas y legitimadas por el TSXG en su escrito: el informe de autopsia; el registro de llamadas en las que se refleja que a las 20:10 horas del día 27 de marzo el recurrente llamó a la víctima y la geolocalización de este teléfono; las malas relaciones que mantenían acusado y víctima; las sustancias acelerantes aparecidas en el lugar; el informe del departamento de incendios; la ocultación de hechos que se desprende de las escuchas telefónicas; y, por último, la ausencia de credibilidad y contradicciones en que incurrió el acusado.
Lo peor de la que ya es la decimocuarta borrasca de gran impacto de la temporada, denominada Nelson, está por llegar. La jornada de hoy, Jueves Santo, toda la costa gallega está en alerta naranja por oleaje de entre 5 y 7 metros, con avisos por acumulaciones de lluvia superior a los 40 litros por metro cuadrado en zonas de Orense y Pontevedra. Y aunque mañana mejorará ligeramente la situación, desde la Agencia Estatal de meteorología (AEMET) indican que seguiremos notando sus efectos, por lo menos, hasta el lunes.
Se trata de una extensa borrasca, nombrada por la AEMET, situada entorno a las islas británicas y cuyos efectos persistirán hasta la próxima semana, dejando en todo el país una Semana Santa pasada por agua. Una borrasca que no solo vino acompañada de abundantes lluvias y fuertes vientos, responsables tan solo en la jornada de ayer de más de 160 incidencias –la gran mayoría en la provincia de Pontevedra, con 79–, sino que también trajo consigo el frío, llegando a registrarse temperaturas bajo cero de hasta -4 grados en el municipio orensano de A Veiga durante la madrugada, según Meteogalicia.
Hoy, por su parte, Galicia continúa bajo la influencia de esta borrasca
parte 20 coches inscritos de las principales marcas». Por desvelar, ABC desvelaba hasta la cuantía de los premios: 20.000 pesetas para el ganador y 5.000 para el segundo clasificado. Una buena suma para la época. «El primer coche saldrá a las diez en punto de la mañana, y los demás irán saliendo del mismo punto a intervalos de tiempo prudenciales», insistía el diario. En total, los participantes darían tres vueltas a un trayecto de 103 kilómetros; unos 300.
El circuito en el que se celebró la carrera no era permanente. Abarcaba parte de las provincias de Madrid y Segovia y, aunque sorprenda, no contaba con las medidas de seguridad de las que hoy disfrutamos. Aunque sí es cierto que ABC hizo públicos algunos consejos; el principal, «vigilar que ningún obstáculo pueda, accidentalmente o por mala intención, obstruir el camino que han de seguir los corredores». Con todo, también se prohibía «terminantemente al público circular por la carretera del circuito, estacionarse en ella o atravesarla» y se obligaba «a toda clase de vehículos a detenerse en las carreteras, caminos y carriles que dan acceso al circuito, a 20 metros».
La prueba la ganó Carlos Salamanca sobre un RollsRoyce de 40 CV con un tiempo de cuatro horas, cincuenta minutos y cuarenta y seis segundos. Nada que ver con los récords de hoy, pero clave a nivel histórico.
abc.es/archivo