Casco y guantes para proteger zonas vitales
Cuando llega el momento de subirse a la moto, hay que ser consciente de la responsabilidad, no sólo del propio piloto, también con la del resto de los usuarios de la vía. Por eso, es importante tener en cuenta una serie de consideraciones antes de emprender la marcha y pensar en diferentes campos como la técnica, el estado de la moto, la propia circulación del tráfico y, sobre todo, el equipamiento.
El cuerpo de los conductores de motocicletas es el que sufre todo el impacto. Por eso, un equipo de protección homologado (guantes, pantalones, botas, casco integral, chaqueta o chaleco con airbag) puede reducir lesiones, fracturas, quemaduras y abrasiones en la piel o en los músculos.
En España, según la DGT, sólo es obligatorio el uso del casco, un elemento en continua evolución: ahora ofrecen mayor protección en caso de colisiones laterales y una mayor comodidad para todo tipo de temperatura exterior, además de integrar carcasas y forros menos rígidos para absorber la máxima energía a velocidades de impacto más bajas y más frecuentes. De hecho, el 80% de los fallecidos en motocicletas son por golpes en la cabeza.
Este sistema ajusta el patrón de iluminación del faro delantero para adaptarlo a la velocidad, ángulo de inclinación o la presencia de otros vehículos.
Pero que el resto del equipo, chaqueta, guantes, botas... no sea obligatorio, no implica que no deba utilizarse. Además, debe hacerse en cualquier circunstancia y época del año, ya sea en trayectos cortos o en viajes largos.
«No es necesario ir siempre con el mono de cuero, pero hay prendas de vestir que disponen de protecciones para moto y tejidos que evitan las abrasiones. Asimismo, las prendas con airbag es el mejor avance después del casco. Y la aparición de pantalones con airbag son