Detectan por primera vez dosis de fentanilo para el ‘menudeo’
▶Investigadores y profesionales sanitarios aclaran que no hay alarma, pero sí control sobre este fármaco ▶«Estamos pendientes en los registros por si vuelve a aparecer» insisten desde la Guardia Civil tras el primer hallazgo
Decir que en Galicia hay fentanilo sería una obviedad porque el uso de este potente analgésico opioide, entre 50 y 100 veces más fuerte que la morfina, es legal para uso terapéutico; siempre con receta médica, y muy controlado por las autoridades sanitarias. Pero en los últimos días saltaron a luz dos noticias que ponen el foco en este potente fármaco. Por primera vez un hospital gallego ha registrado un caso de intoxicación por fentanilo. Y, por primera vez también, la policía ha intervenido a un pequeño traficante algunas dosis de esta sustancia, que creen que estaban preparadas para vender al ‘menudeo’. Tanto las autoridades sanitarias como las policiales dicen estar alerta ante el inquietante descubrimiento, pero en ambos ámbitos se rechaza hablar por ahora de alarma.
A mediados de mes, la Guardia Civil detuvo a un vecino de Culleredo (La Coruña) por traficar con droga a pequeña escala. En la entrada y registro de su piso, que utilizaba para el trapicheo, los agentes de la Benemérita encontraron 38 gramos de cocaína, 0,74 gramos de heroína, 175 de hachís, 107 de marihuana y otros 150 gramos de sustancia para el corte de la droga (cafeína). También había en el domicilio diferentes herramientas usadas para pesar y cortar las sustancias, como dos básculas de precisión y cuchillos que tenían restos hachís y tarros de marihuana. Pero cuál fue la sorpresa entre los agentes que intervinieron en la operación: que entre la droga había también 25 microgramos de fentanilo. Equivalente a seis dosis.
Fuentes de la Guardia Civil confirman a ABC que es la primera vez que en una operación contra el tráfico de drogas en Galicia intervienen fentanilo preparado –presuntamente– para la venta al ‘menudeo’, es decir, en pequeñas dosis listas para su consumo y a pie de calle. De camello a cliente. Aunque el hallazgo, por ser aislado, tampoco ha generado excesiva preocupación en el Instituto Armado. «No hay alarma, pero estaremos pendientes en los próximos registros por si esta sustancia sigue apareciendo», explican las mismas fuentes sobre esta sustancia prohibida.
ALGUNAS CLAVES
En las últimas semanas, se registró la primera intoxicación en Galicia por consumo no terapéutico de fentanilo. Fue en el Hospital Universitario de La Coruña (Chuac). Es la única de la que se tienen constancia en la región, según la Consellería de Sanidade.
La primera intoxicación detectada en Galicia ha coincidido en el tiempo, más o menos, con la primera intervención de fentanilo en una operación antidroga. Un ‘camello’, de poca monta, que tenía en casa seis dosis, supuestamente, para vender al ‘menudo’ junto con otras sustancias estupefacientes.
Fuentes de la Guardia Civil y de la Policía Nacional coinciden en señalar que están en alerta por si aparece fentanilo en otras operaciones antidroga, pero no ven motivo de alarma: «Tenemos muchos melones abiertos, pero, este, todavía no».
En todo caso, de aparecer algún caso más de tráfico de fentanilo, todo apuntaría a simple ‘menudeo’, con la sustancia obtenida ilegalmente en farmacias u hospistales cercanos. Se descarta un tráfico de fentanilo a gran escala y sofisticado como ocurre en Galicia con otras sustancias (cocaína, heroína).
Hay un detalle no menor para que las autoridades policiales descarten por ahora el alarmismo, aunque se mantengan a la expectativa. Que más que una cuestión de tráfico de drogas, de lo que se trata en este caso es de «un mal uso» de esta sustancia. No es como la cocaína, heroína o hachís, que se importan de otras latitudes a través de organizaciones de narcotraficantes más o menos complejas. Aquí, todo es más sencillo: el fentanilo podría haber salido de alguna farmacia de la zona o centro hospitalario. Lo que la Guardia Civil decomisó, concretamente, fueron seis dosis en parches de 25 miligramos. En el caso de Culleredo, el detenido se negó a declarar ante la Guardia Civil por lo que los agentes aún no aclararon su procedencia. El Juzgado de Instrucción número 7 de La Coruña, que ha asumido la investigación de la causa, dejó a este individuo en libertad, pero en condición de investigado por
varios delitos de tráfico de estupefacientes que aún no han podido ser clarificados.
La Policía Nacional saca conclusiones muy similares a las de la Guardia Civil. Fuentes de la Policía confirman a ABC que, hasta la fecha, este cuerpo no ha encontrado fentanilo en ninguna operación contra el tráfico de drogas. «Estamos alerta, como en el caso de cualquier tipo de sustancia que pueda ser adictiva, pero una cosa es estar alerta y otra cosa que haya alarma», añaden las mismas fuentes. «Tenemos muchos melones abiertos, pero, este, todavía no», sentencian. En todo caso, reconocen, no bajan la guardia.
Galicia no es EE. UU.
Tampoco hay alarma en los centros sanitarios gallegos respecto al fentanilo, pero sí atención. Sobre todo, después de que hace poco se detectara en el Hospital Universitario de La Coruña (Chuac) la primera intoxicación por esta sustancia —al menos, que se tengan constancia de ello— en Galicia. Según explican a ABC desde la Consellería de Sanidade, no hay constancia de más casos en el resto de áreas sanitarias de la región.
Ni problema sanitario, ni de tráfico de estupefacientes. Al menos, de momento. Ni Galicia —ni tampoco España en su conjunto— es Estados Unidos, donde el avance del fentanilo está causando verdaderos problemas de salud pública en algunas ciudades. En Galicia, el único caso de venta ilegal de esta sustancia, el mencionado de Culleredo, no apunta, ni mucho menos, a una gran trama de narcotráfico. Todo parece más simple: alguien que consiguió la sustancia de forma ilegal, en una farmacia o hospital de zona, para intentar venderla. También el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, intentó restarle importancia: «Es anecdótico, no es un problema demasiado relevante en España. Tenemos problemas de drogadicción de mayor magnitud con otras sustancias».
Lo cierto es que conseguir fentanilo en una farmacia no es una labor sencilla. Existe muchos controles antes de que pueda dispensarse, porque se trata de un medicamento con una potente capacidad analgésica que está pensado para tratar enfermedades que causan muchos dolor, algunos tipos de tumores o patologías degenerativas, además de procesos en los que el dolor a tratar se sitúa en las escalas médicas más altas. Su consumo fuera de estos preceptos genera euforia y somnolencia, pero a largo plazo da pie a una gran dependencia y fallos respiratorios capaces de causar paros cardíacos y la muerte.
La Guardia Civil interviene a un vecino de Culleredo en su domicilio seis dosis de esta sustancia preparadas para vender al por menor