Qué esperar hoy de la oposición
El BNG se vestirá de alternativa. Más dudas suscita este PSdeG
Hacia las ocho de la tarde, Alfonso Rueda saldrá del Parlamento ya reelegido como presidente de la Xunta para los próximos cuatro años. Si el martes su discurso fue un monólogo, ahora el guion obliga a escuchar la réplica de los grupos de la oposición, que seguramente enseñen hoy las líneas maestras de lo que será su tarea de crítica y alternativa a lo largo de la legislatura.
El resultado del 18F le mostró al BNG de Ana Pontón lo prematuro de aquella intervención suya en la primera investidura de Rueda, donde poco menos que parecía ella la candidata a la Presidencia. Estaba exhibiendo su programa, ese que la ciudadanía no ha avalado en las urnas, aunque sus compradores están en aumento. Por tanto, todo hace indicar que la senda será muy similar: enmienda a la totalidad del PP, alternativa absoluta y seguir enterrando la mochila soberanista bajo un manto de aparente moderación. Pontón iniciará hoy la campaña de las próximas autonómicas.
Más incertidumbre rodea al PSdeG, a las puertas de un congreso que devolverá a Besteiro los plenos poderes en el partido, ahora sin personas interpuestas. Porque la fragilidad socialista tras el 18F y su supeditación a Ferraz envuelve su estrategia en una nebulosa. ¿Seguirán yendo de muleta útil del BNG? ¿Podrán exhibir un perfil propio? ¿Es pronto para saber qué quiere ser de mayor el PSOE gallego? ¿Mientras Sánchez resida en Moncloa es imposible cualquier tipo de acuerdo que implique críticas al Gobierno central? ¿Qué posición mantendrá si Rueda le tiende la mano para reclamar cuestiones que Besteiro prometió en campaña? La sensación es que el PSdeG ha entrado en un proceso de transición, sin que se sepa ni cuánto va a durar, ni cuál es el punto de llegada.
Y por si nos aburrimos tenemos una pequeña franquicia del circo político orensano en el representante del Grupo Mixto, al que le molesta que el presidente de la Xunta hable sin límite de tiempo y que los diputados aplaudan a sus líderes. En el fondo hay que entenderlo, Armando Ojea no tiene quien le toque las palmas. Igual en la tele de su alcalde añaden aplausos enlatados.