«Quiero hacer este camino con firmeza, humildad y por Galicia»
▶La mayoría absoluta del PP revalida a Rueda, frente al voto en contra de PSOE y BNG y la abstención de DO ▶Reprocha a Pontón su cambio de postura con Altri y pide a Besteiro que mantenga su promesa sobre la AP9
ALFONSO RUEDA, PRESIDENTE DE LA XUNTA
El Parlamento de Galicia eligió ayer de nuevo a Alfonso Rueda como presidente de la Xunta durante la segunda jornada del debate de investidura. Fueron suficientes los cuarenta votos de los diputados del Partido Popular, que obtuvo la mayoría absoluta en las elecciones del pasado 18 de febrero. En contra se posicionaron los 25 diputados del BNG y los 9 del PSOE, mientras que el único representante del grupo mixto optó por abstenerse. En su intervención final, Rueda pidió la «confianza» de la Cámara «para seguir superándonos (...), reforzar los servicios públicos fundamentales, fomentar los sectores estratégicos», lograr que Galicia esté «cada vez más vertebrada». «Confianza para, sin olvidar lo que fuimos, saber lo que somos y lo que queremos ser», y emprender ese camino «con firmeza, con humildad y por Galicia».
«Hay una hoja de ruta clara», proclamó el candidato en su último turno, instantes antes de su elección, «pido su confianza, sabiendo qué pido y a qué me comprometo, con la responsabilidad para asumir los retos del presente y del futuro, con unidad, empuje y fuerza para defender a Galicia en todos los foros, autonómicos, nacionales e internacionales». Tras la votación, el presidente del Parlamento, Miguel Santalices, comunicó el nombramiento de manera telemática, al Rey, para su publicación en el BOE.
La agenda de la investidura quema así una etapa más. La siguiente tendrá lugar mañana sábado, cuando Rueda tome posesión de manera oficial del cargo, en un acto que se celebrará en los jardines del Parque de San Domingos de Bonaval, en Santiago de Compostela, tomando el relevo de la Plaza del Obradoiro. El domingo a mediodía se prevé que se dé a conocer la composición del nuevo gobierno gallego, y sus integrantes tomarán posesión de sus carteras en la mañana del lunes.
«Ya me gustaría no tener un Gobierno que nos niega lo que le da a otros, que nos da un trato desigual»
«No me escucharían a mí decir que habría que levantar muros, como a Pedro Sánchez. Al revés, aquí los rebajaremos»
«Señor Besteiro, se comprometió a que la AP9 iba a ser gratuita. ¿Eso se sigue manteniendo?»
«Las mentiras del BNG con Altri salieron fuera de su control. La señora Pontón lo sabía todo, aunque ahora se sorprenda»
Careo con la oposición
La segunda jornada del debate de investidura deparó, por lo demás, el primer careo de la legislatura de Rueda con los portavoces de la oposición. Se percibió una cierta vocación de desquite ante un PSOE y BNG que durante la campaña se vieron ganadores antes de que los ciudadanos fueran a votar. «Algunos no entendieron las elecciones, y ya pasaron», lanzó como primer capotazo, para seguir picando en la bancada nacionalista. «Mientras no acepte que nos votaron más a nosotros que a usted», afirmó, dirigiéndose a Ana Pontón, «es una soberbia importante que le impedirá hacer cosas; tenemos un problema si usted no lo asume».
En este primer lance de la legislatura se vislumbró que la portavoz del
BNG va a ser la gran antagonista del líder popular. Hacia ella fueron sus principales reproches, centrados en afearle que «recurre a lo de siempre, cifras que no son verdad, cosas que no se corresponden con la realidad, están tergiversadas o son demagogia pura».
Capítulo aparte con Altri. Rueda atribuyó el «cambio total» de los nacionalistas en esta cuestión al «batacazo electoral» y a su necesidad de alzar «una bandera para levantarse cuanto antes». «En este Parlamento votaron a favor de Altri con los datos que teníamos todos –y que posteriormente fueron exhibidos por el portavoz popular Alberto Pazos en una iniciativa del PSOE de la anterior legislatura–, y me alegro de ganar las elecciones y de que usted no gobierne», por las presiones a las que se podría haber sometido a los funcionarios que están evaluando el proyecto. «La señora Pontón lo sabía todo, se abruman de sus propias mentiras, están fuera de sucontrol», denunció, «si los proyectos cumplen, hay que autorizarlos; si no, los rechazamos». Rueda insistió en tender la mano para el pacto por la energía y la industria. «Amplíe las miras», aconsejó a Pontón, «este gobierno va a ser responsable, va a examinarlo todo con lupa y no va a dejar que las oportunidades de Galicia pasen, porque las cogerán en otros sitios». «Únanse a ese pacto, dejen los condicionantes», porque «las elecciones ya pasaron, la gente habló, nos dio una confianza inmensa y a ustedes los mandó a la oposición».
La AP9 de Besteiro
La bienvenida al socialista José Ramón Gómez Besteiro a la Cámara gallega no estuvo exenta de recado. «Viene usted aquí un poco arrastrado, pensando que quien le trajo aquí le sigue exigiendo que defienda cualquier cosa indefendible que haga el Gobierno central aunque no haya por donde cogerla», le colocó como primer par de banderillas, «a usted le dejaron tirado en plena campaña, su gobierno trabajó no para usted sino para que no ganara el PP, y yo
le pido que se rebele». Rueda le conminó a «recuperar» el camino perdido en beneficio de los nacionalistas, «que tienen voto prestado» del PSdeG.
Un primer rejón para examinar a Besteiro. «¿Sigue manteniendo lo que dijo en el debate de la campaña de que la AP9 iba a ser gratuita? Entiendo que eso se puede aplicar de inmediato», le retó, «podemos ir a Madrid los tres, yo como presidente de Galicia y ustedes como oposición, y le decimos a Pedro Sánchez que la AP9 tiene que ser gratuita ya, y ganará Galicia. Podemos ir la semana que viene». El candidato afirmó que «sería difícil de entender» que no pudiera materializarse «tras su compromiso explícito», porque «espero que eso no dependiera de que usted fuera presidente, sino del interés de Galicia». No obtuvo respuesta de un Besteiro que sonreía con sorna desde su escaño.
No todo fueron capotazos por la derecha; Rueda también exhibió algo de mano izquierda: «Tengo muchas esperanzas en que ustedes se resitúen, tienen campo para recuperar», una resurrección socialista que «vendrá con que sean valientes y reivindicativos». Incluso alimentó la faceta de ‘conseguidor’ exhibida por Besteiro en campaña. «Si para conseguir cosas tengo que ir con usted» a Moncloa «y me las dan, pues será lamentable, pero si funciona...».
Todavía hubo más dardos a Pedro Sánchez, «su jefe, ese al que usted se siente aquí obligado a defender»: financiación autonómica, la quita de la deuda, las infraestructuras, la ley del litoral... Ese apunta a ser el flanco que más exploren Rueda y el PP para zarandear al líder socialista, ayer bastante impasible ante las críticas.
Rueda aprovechó para seguir desgranando los cambios en la estructura de su gobierno. Ayer avanzó que creará una oficina económica que dependerá directamente de su Presidencia, y cuya misión principal será «coordinar proyectos estratégicos, para que no se pierda una sola oportunidad, para hacer que Galicia siga avanzando». Este nuevo departamento –añadió– se encargará también de «agilizar la ejecución de los fondos Next-Gen», que cifró en el 97% hasta la fecha. También aclaró que la dirección de asuntos constitucionales no será solo una asesoría jurídica para defenderse en los tribunales de los recursos del Gobierno, sino que también explorará vías para seguir desarrollando las posibles competencias estatutarias pendientes.
La legislatura echa a andar. Galicia ya tiene presidente. Ahora falta conocer su gobierno. Lo dicho: el domingo.
Rueda avanzó la creación de una oficina económica encardinada en su área de Presidencia para coordinar proyectos estratégicos