Román Rodríguez, el veterano de un núcleo duro que concentra la mayor carga política
▶ El titular de Cultura y los exvicepresidentes se erigen en primeros espadas del gobierno
El pasado 4 de abril, Alfonso Rueda presidió el –hasta hoy– último Consello de la Xunta. Hasta nuevo aviso, no volverá a haber otro con el gobierno en funciones. No compareció solo en San Caetano ese día. Le acompañó Román Rodríguez, para ofrecer detalles de la candidatura de la Ribeira Sacra a Patrimonio de la Humanidad, y el trámite que debía solventar el día siguiente en la isla de la Palma. En plenas quinielas sobre la composición del nuevo gobierno, mientras ganaba enteros
–y de forma atinada, como se constató ayer– la opción de que Cultura volviera a desgajarse de Educación, la presencia de Román Rodríguez suscitaba el mismo tipo de comentario que la de Miguel Corgos anteriormente. ¿Otorgaba algún marchamo de refrendo comparecer junto al presidente?
El lalinense, que ha pasado a ser el más longevo de los conselleiros –supera en unos meses a Ángeles Vázquez–, pudo celebrar al día siguiente que la Ribeira Sacra sigue en la pelea por entrar en un club selecto que dispararía la proyección de este entorno a caballo entre las provincias de Lugo y Orense. Después, en el Parlamento, escuchó cómo Rueda anunciaba que Educación pasaba a quedarse con las competencias científicas, para potenciar el I+D+i, alineando el ámbito universitario con los centros singulares de investigación. En su día, sacó las castañas del fuego con la gestión del Covid en el ámbito educativo, al recuperar las competencias que ahora ve ampliadas.
Tarea que asume el Doctor en Geografía, que orgánicamente viaja hasta el primer escalón del gobierno. Ahí continúan, despojados de la atribución de vicepresidentes,
Diego Calvo y Ángeles Vázquez. Los números 2 y 3 de facto. Calvo ha brindado colmillo político, un valor que no abundaba en el gobierno gallego. Recientemente, sin ir más lejos, acudió al Senado para reafirmar la posición de la Comunidad ante las pretensiones secesionistas de Cataluña y las concesiones de Pedro Sánchez. Como líder del PP coruñés, en su haber figuran los 13 escaños logrados en la provincia el 18F; y como responsable de la parcela correspondiente, el Bono Deporte, un
acierto.
‘Hub’ de renovables
Ángeles Vázquez pierde las atribuciones de Vivienda, pero la de Medio Ambiente y Cambio Climático es una cartera con mucho que decir esta legislatura. Rueda ha proclamado, en múltiples ocasiones, que quiere convertir a Galicia en ‘hub’ de energías renovables. El presidente se apoya en el potencial de un territorio que tiene el mar y el viento a su favor. En la pasada legislatura ya se aprobó una ley de aprovechamiento de recursos naturales y la creación de una sociedad público-privada para gestionarlos. Es un asunto sensible, porque el BNG se opone frontalmente, y el PSOE tiende a colocarse de perfil. La confrontación política, los próximos cuatro años, tiene aquí terreno abonado. Y, además, ha surgido un nuevo escollo: las sentencias del TSXG paralizando proyectos eólicos. De ahí que Rueda confíe a Vázquez la tramitación de proyectos que considera claves.
Junto a este tridente, se afianzan otros dos conselleiros. Una es la más joven, Fabiola García, que compaginará Política Social con Igualdade. Lleva seis años en el gobierno, incluidos los de la pandemia, en los que los fallecimientos de usuarios de residencias de mayores también fueron utilizados sin rubor en el rifirrafe político. El otro es Miguel Corgos. Llegó al ejecutivo por un motivo luctuoso, el duro golpe de la pérdida de Valeriano Martínez en 2021. Hay consenso en que, con los Orzamentos ‘en la cabeza’, es poco menos que indispensable.