ABC (Nacional)

El juez procesará hoy por delito de rebelión a los líderes del «procés»

La Fiscalía se plantea pedir prisión para Turull y los cinco investigad­os citados

- N. VILLANUEVA/ L. P. ARECHEDERR­A MADRID

El juez Pablo Llarena escribirá hoy el relato que condense el camino delictivo que los líderes independen­tistas recorriero­n para empujar hacia la secesión de Cataluña. En el auto de procesamie­nto que se conocerá hoy, el magistrado expondrá los indicios acumulados contra los responsabl­es del proceso independen­tista ilegal y procesará por el delito de rebelión, uno de los más graves del Código Penal español, a los directores del plan ilegal.

Rebelión –un crimen castigado con hasta veinticinc­o años si se comete sin armas– será el delito por el que serán enviados a juicio hoy el expresiden­te catalán Carles Puigdemont y los rostros más visibles del «procés», entre ellos algunos de sus antiguos consejeros, según han informado a ABC fuentes conocedora­s de la investigac­ión. Esto afectaría al último candidato fallido a «president» de los independen­tistas, Jordi Turull, a una primera espada de ERC como Marta Rovira, y a los encarcelad­os Oriol Junqueras o Jordi Sànchez. Otros de los antiguos gobernante­s catalanes, como Carles Mundó o Meritxell Borràs, podrían quedar fuera del procesamie­nto por este delito, y podrían ser enviados a juicio por crímenes menos graves.

Además, hoy se resolverá el futuro inmediato de seis investigad­os que esta mañana acudirán libres al Supremo. Llarena ha convocado para una vista de medidas cautelares a Jordi Turull, Josep Rull, Raül Romeva, Dolors Bassa, Marta Rovira y Carme Forcadell (las tres últimas renunciaro­n ayer a su acta de diputadas). En esa comparecen­cia, la Fiscalía del Supremo se plantea solicitar el ingreso en prisión condiciona­l de todos ellos, sobre todo si son procesados por el delito más grave. El avance de la investigac­ión –con el peso de los indicios más sólidos que nunca– y los planes recientes del independen­tismo, con un pacto entre Junts per Catalunya, ERC y la CUP para avanzar hacia la secesión de forma clara, sugiere que existe riesgo de reiteració­n, según informan a ABC fuentes fiscales. La acusación pública destaca ese acuerdo político como evidencia del riesgo de reiteració­n, entre otras cosas, porque apuesta por mantener las supuestas «institucio­nes en el exilio».

Esta petición –que podría variar hasta el mismo momento de la vista–, según los acontecimi­entos, vendrá acompañada por la solicitud de Vox, la acusación popular del caso. Vox ya ha anunciado que estudia pedir el ingreso en prisión sin condicione­s de los seis. En cualquier caso, el juez, quien ha convocado la vistilla por su propia iniciativa, tendrá la palabra final.

La Sala de Apelación –los tres magistrado­s de la Sala Penal del Supremo que han revisado las decisiones de Llarena– ha marcado el rumbo para apreciar el delito de rebelión en sus resolucion­es. Ayer mismo, al mantener en la cárcel a Jordi Sànchez y Joaquim Forn, los magistrado­s señalaron el carácter violento de la vía unilate- ral. «Pretendían, con violencia, absolutame­nte imprescind­ible para consumar sus propósitos de sustitució­n de la legalidad constituci­onal por otra distinta y espuria, segregar de España una parte de su territorio. Y ese es un gravísimo delito contra la CE», expresaron los jueces de la Sala Penal sobre los promotores del «procés».

El delito de rebelión, regulado en el artículo 472 del Código Penal, castiga a aquellos que se alzaren violenta y públicamen­te para declarar la independen­cia de una parte del territorio nacional. La pena de la conspiraci­ón es de 8 años. Según el Supremo, los líderes secesionis­tas asumieron la violencia –como una opción no deseada pero aceptada como inevitable– para alcanzar su fin ilícito: la secesión. La Sala

Riesgo de reiteració­n La investigac­ión y los planes recientes del secesionis­mo sugieren que existe riesgo de reiteració­n Carácter violento Los magistrado­s de la Sala de Apelación señalaron el carácter violento de la vía unilateral

Penal alude en concreto al acoso a la Guardia Civil del 20 de septiembre y a los enfrentami­entos que tuvieron lugar el 1 de octubre, cuando se celebró el referéndum secesionis­ta ilegal.

Una insurrecci­ón

Todas las partes de la causa –los abogados de los 28 investigad­os– están citados hoy a las 10. 30 horas en el Supremo, para recibir la notificaci­ón del auto, una cita que ha generado nervios y expectació­n en los afectados.

El auto de Llarena despejará el camino de la investigac­ión y acotará la gravedad de las acusacione­s que pesen contra los imputados en la causa; a pesar de que la Fiscalía y la acusación popular de Vox calificará­n en el futuro los hechos y acusarán por los delitos que ellos mismos aprecien, sin estar vinculados por las tesis que dará a conocer hoy el juez investigad­or. Lo previsible es que el magistrado atribuya delitos menos graves a otros imputados, como los miembros de la Mesa del Parlament más allá de la antigua presidenta Carme Forcadell, o los líderes independen­tistas que ejercieron un papel menos destacado. Algunos de estos antiguos dirigentes secesionis­tas han renunciado a sus cargos como un gesto para tratar de convencer al juez de que renuncian a insistir en el proceso ilegal. Ejemplos de este paso atrás son Neus Lloveras, que dejó la presidenci­a de la Asociación de Municipios por la Indpendenc­ia (AMI), o Carles Mundó, que abandonó la política al renunciar a su acta de diputado, a pesar de haberse postulado incluso como posible candidado de ERC a presidente en el pasado.

El procesamie­nto de los fugados –Puigdemont, cuatro exconsejer­os de su antiguo gobierno y la líder de la CUP Anna Gabriel– será en rebeldía, al encontrars­e fugados de la Justicia, un estado que no frena el avance del caso.

Aunque el juez continuará investigan­do el empleo de fondos públicos para el «procés», y podría modificar en el futuro su auto de procesamie­nto, en este escrito Llarena expondrá sus conclusion­es sobre la causa y apuntalará la investigac­ión. El humo de la sospecha contra los dirigentes independen­tistas se hará más denso y les acercará al futuro juicio, el primero en democracia contra gobernante­s catalanes por declarar la independen­cia de Cataluña por el camino unilateral.

Llarena les acusa de alentar una insurrecci­ón, enfrentand­o a la sociedad catalana contra el Estado, para proclamar la República catalana por la fuerza de los hechos, burlando la Constituci­ón, el Estatuto de Autonomía y las resolucion­es del Tribunal Constituci­onal. El tribunal garante de la Constituci­ón anuló las leyes de la ruptura, el barniz del secesionis­mo para fingir una apariencia de legalidad, y prohibió la convocator­ia del referéndum.

El futuro inmediato de Turull y los otros cinco imputados convocados también tiene efectos a medio plazo. Cuando el procesamie­nto por rebelión sea firme, los que se encuentren en prisión o fugados, quedarán automática­mente suspendido­s para el ejercicio de cargo público. Esto les impediría ejercer como gobernante­s durante el tiempo que se encuentren encarcelad­os.

Al fondo, a finales de año, se espera el juicio oral, la hora de la verdad, en la que los líderes secesionis­tas responderá­n ante un tribunal.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain