Los hoteleros fían la Semana Santa a un alza de temperaturas
El hecho de que la Semana Santa haya caído este año a finales de marzo no suele sentar bien al sector hotelero. La previsión de su patronal, Cehat, es que los establecimientos situados en las estaciones de esquí cuelguen el cartel de completo, lo que contrastará con los hoteles de costa que, si no suben las temperaturas, se podrían quedar por debajo de la ocupación media que registraron en 2017 y que fue de un 85%. En la Costa del Sol, por ejemplo, la previsión de ocupación hotelera se sitúa en torno al 70%. Las ciudades con más tradición religiosa, por su parte, esperan tener ocupadas el 80% de las habitaciones de hotel.
Para Cataluña, el destino más dañado por la coyuntura política inestable del último trimestre de 2017, las previsiones son ahora buenas y, en concreto, para Barcelona se espera una ocupación de un 80%.
Entre los hitos que marcarán esta Semana Santa figura en lugar destacado la depreciación de la libra respecto al euro, lo que hará bajar la llegada de turistas británicos a nuestro país, uno de los principales mercados emisores de visitantes hacia España.
La patronal cree que «pese a que somos optimistas para la primavera-Semana Santa 2018, el descenso en el número de pernoctaciones y el precio medio hacen que esperemos un crecimiento menor que en 2017».