Baleares aprobará el decreto del catalán pese a las dudas jurídicas
El Gobierno recibe el informe favorable del Consejo Consultivo, con tres votos críticos
El Gobierno balear, que preside la socialista Francina Armengol, tiene previsto aprobar hoy el decreto que regulará el conocimiento de catalán. Un requisito que deberán tener los médicos, enfermeros y auxiliares que deseen trabajar en la sanidad pública de esta Comunidad. El Consejo Consultivo entregó esta semana al Govern el preceptivo dictamen previo —no vinculante— sobre el decreto. El citado informe fue «favorable», si bien del total de diez consejeros que integran este órgano superior de consulta de la Comunidad, tres de ellos emitieron votos particulares. Estos miembros del organismo de asesor han entendido que el decreto podría ser total o parcialmente contrario a la ley.
El nuevo decreto establece que se podrán presentar a oposiciones cualquier profesional sanitario, aunque no tenga hoy la preceptiva titulación lingüística. Esta titulación se deberá conseguir en un plazo de dos años una vez obtenida la plaza. Si transcurrido ese tiempo dicho profesional no pudiera acreditar un nivel básico de catalán, no perderá su plaza, pero no podrá participar en procesos de movilidad ni acceder al complemento de carrera profesional. Así consta en el artículo 7 del decreto que, precisamente es uno de los puntos más cuestionados por los tres letrados del Consejo Consultivo, que emitieron un voto particular. Dichos juristas entienden que el citado artículo supone una restricción de derechos de los empleados públicos.
Cabe recordar que el primer borrador del decreto, finalmente desechado, señalaba que el catalán sería un requisito para que auxiliares, enfermeros y médicos pudieran presentarse a oposiciones. Armengol desechó ese primer borrador porque con él no se garantizaba que en el futuro se pudieran cubrir todas las plazas de profesionales sanitarios que necesita el Archipiélago.
Rebajar exigencias
La versión definitiva del texto fue pactada en febrero por el PSOE y por MÉS por Mallorca, coalición que forma parte del Ejecutivo de Armengol. Los ecosoberanistas aceptaron rebajar las exigencias lingüísticas iniciales. Sin embargo, la controversia en torno al decreto no ha amainado. Así, en las últimas semanas han confirmado su marcha de los principales hospitales de Mallorca, Menorca e Ibiza diversos médicos especialistas por la exigencia del catalán. Se oponen también al decreto el Sindicato Médico de Baleares, CSIF, el PP, Cs, Actúa Baleares y diversas entidades de pacientes. Además, el Gobierno central anunció su intención de recurrir el decreto.
En ese contexto, la plataforma Mos Movem (En Marcha) tenía previsto realizar ayer una concentración ante el Consulado del Mar, sede del Ejecutivo autonómico, para expresar una vez más su rechazo a dicho decreto. Sin embargo, finalmente se llevarán a cabo concentraciones puntuales en distintos centros sanitarios de las cuatro islas.
No es esta la primera protesta que se ha celebrado en Baleares desde que se conoció la intención del Gobierno balear de aprobar este decreto. Una de las más multitudinarias, calificada de histórica por los convocantes, se celebró el pasado 18 de febrero. Cientos de personas salieron la calle bajo el lema «Los idiomas no salvan vidas. Por una sanidad sin fronteras lingüísticas», convocados por la plataforma civil ciudadana Mos Movem (En Marcha).