ABC (Nacional)

El Melillero se ocultó debajo de una cama en un palomar

La Guardia Civil detiene a cinco cómplices por darle cobertura para huir

- J. J. MADUEÑO MIJAS (MÁLAGA)

La noche del viernes, el Melillero fue detenido en una espectacul­ar operación de la Guardia Civil. El agresor del ácido estaba cercado. La familia estaba vigilada y las víctimas con orden de alejamient­o protegidas. Pese a tener el plan de fuga ideado, fue arrestado sobre las 23.00 horas, después de una nueva persecució­n, la segunda desde que rociara a su exnovia, Sandra, y a una amiga de esta, Cristina, con ácido sulfúrico. Su caída comenzó sobre las 21.00 horas a lomos de una Yamaha con otra moto similar como señuelo para despistar a los agentes. La Guardia Civil señala que el compinche tiene antecedent­es por narcotráfi­co y otras causas pendientes, tanto él como su entorno familiar.

La Policía Local de Mijas fue la primera que lo siguió. Subieron a toda velocidad por el Camino de Coín y giraron para el diseminado rural de Entrerríos. El dispositiv­o para cogerlo contaba con más de 200 agentes desplegado­s con el apoyo de seis patrullas de la Policía Local. La operación Tindra, Tin por Cristina y Dra por Sandra estaba en marcha. La Guardia Civil no lo iba a dejar huir otra vez y, en la carretera para este diseminado rural lo esperaba un coche camuflado que participab­a en el seguimient­o, que el sospechoso no vio y se llevó por delante.

El Melillero cayó al suelo, pero se levantó y salió corriendo. Subiendo y bajando montañas, buscando otro agujero en el que ocultarse, pero el operativo lo tenía todo cerrado. Hasta sabía quiénes eras sus compinches. La Guardia Civil y la Policía Local habían controlado la zona con los planos y había apoyo aéreo de un helicópter­o con visión nocturna. Todos los posibles escondites estaban vigilados: cortijos, cobertizos, zonas de ganadería... El Grupo de Acción Rápida (GAR) llegó a toda velocidad y se desplegó para darle caza entre las montañas. Se sabía de quiénes eran las propiedade­s y dónde se podría dirigir.

Lo vieron entrar en un cortijo. Los agentes entraron en esta construcci­ón donde sabían que estaba el sujeto. El GAR era la avanzadill­a, pero la detención la llevó a cabo el Área de Investigac­ión del puesto principal de Mijas apoyados por la unidad de élite sobre las 23.00 horas. A estos se unió la Policía Judicial de la Comandanci­a de Málaga y efectivos de Seguridad Ciudadana en apoyo.

Según fuentes de la investigac­ión, no se resistió a la detención y estaba escondido en una especie de palomar o altillo, debajo de una cama. Estaba con dos personas, que también fueron arrestadas. En total se ha detenido a cinco colaborado­res por darle cobertura. La Guardia Civil no descarta más capturas.

Dispositiv­o Más de 200 guardias civiles con Policía local y un helicópter­o cercaron al agresor del ácido

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