Los cinco vocales discrepantes acusan al Consejo de «servir» a la estrategia de bloqueo del PP
Los cinco vocales que votaron en contra del acuerdo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) del pasado jueves, en el que se instaba a la Mesa del Congreso a que reconsiderara su decisión de seguir adelante con la reforma de este órgano sin dar audiencia a los jueces, afirman que sus dieciséis compañeros han incurrido en «deslealtad». Pese a que el acuerdo fue respaldado por vocales de perfil progresista, creen que el órgano está sirviendo a los intereses del Partido Popular y llegan a acusar al CGPJ de desacreditar a España ante Europa y responsabilizarle de eventuales actuaciones que pudieran llevar a cabo instituciones europeas.
Así lo expresan en un voto particular el exdiputado socialista Álvaro Cuesta, al que se han unido los otros cuatro vocales discrepantes, vinculados al PSOE e IU (Pilar Sepúlveda y Concepción Sáez) y a Jueces para la Democracia (los magistrados Clara Martínez de Careaga y Rafael Mozo). Señalan que el Pleno se ha extralimitado de sus funciones al pedir a la Mesa del Congreso esa rectificación porque no está entre las funciones del CGPJ informar sobre proposiciones de ley y sí sobre proyectos emanados del Gobierno. Hablan de una «confrontación gratuita, infundada e impropia en términos constitucionales y de separación de poderes» contra la Mesa de la Cámara Baja.
En el texto, de un marcado perfil político, sostienen que el acuerdo del Consejo no respeta la separación de poderes, una apreciación que también hicieron, pero en sentido contrario, sus compañeros al denunciar la injerencia del Legislativo en sus funciones. «El problema de fondo –apuntan– es que por causa de una inconstitucional y reprochable actitud de bloqueo que impide la renovación en plazo del CGPJ, se está violando la Constitución».
Sus críticas llegan hasta los medios de comunicación, en concreto a este periódico por denunciar en su editorial del pasado viernes la mordaza a los jueces y el asalto al Poder Judicial que esta reforma supone.