Custodio de la memoria de Azorín
José Payá (1957-2021) Impulsó internacionalmente la Casa Museo Azorín
DETRÁS de la memoria de Azorín y de la renovación crítica sobre su obra en las últimas décadas ha estado José Payá Bernabé (1957-2021). Aunque comenzó estudios de Derecho, cambió después su trayectoria, que quedó ligada a su dirección de la Casa Museo Azorín en Monóvar, su ciudad natal y del escritor. Adquirida la vivienda de los Martínez-Ruiz por la Caja de Ahorros del Sureste (posterior Caja de Ahorros del Mediterráneo, CAM) en los años sesenta, Payá sustituyó como director al historiador Vicente Ramos tras la jubilación de este en 1983. Desde entonces veló como custodio del patrimonio intelectual del clásico. Emprendió contactos con instituciones a las que estuvo vinculado el autor y consiguió la incorporación de fondos documentales con donaciones y compras, convirtiendo el centro en el eje imprescindible del azorinismo. Trabajó para que aumentaran los estudios sobre Azorín, inspirando un cambio de su imagen en la que acabó predominando la del exponente de la modernidad literaria y periodística. Por sus instalaciones pasaron personalidades de la literatura como Vargas Llosa, Camilo José Cela o María Kodama.
Bajo su gestión la Casa Museo impulsó la dimensión nacional e internacional de quien le daba nombre. Ayudó a llevar a cabo congresos, ediciones de sus libros, exposiciones itinerantes, efemérides y publicaciones, sin omitir la divulgación entre el gran público y escolares. En los años ochenta fue determinante la creación de la revista Anales azorinianos y el apoyo a los Coloquios internacionales que inició la Universidad de Pau en Francia que, junto a los organizados con la Universidad de Alicante, facilitaron el encuentro de distintas generaciones de investigadores y dieron salida a sus hallazgos.
La Casa Museo participó incluso en hitos como el traslado de los restos de Azorín desde Madrid a Monóvar en 1990 y en la edición de sus Obras escogidas (1998) por Espasa. Su gestión le llevó también a ser vicepresidente de la Asociación de Casas Museo y Fundaciones de Escritores (ACAMFE) y a formar parte de la Comisión Lectora del premio Azorín de novela, de la editorial Planeta y la Diputación de Alicante, habiendo intervenido como jurado en varias ediciones.
Payá combinó durante unos años la dirección de la Casa Museo Azorín con la de la Casa Museo Modernista de Novelda, ciudad donde residía desde su matrimonio con Tere Rico, con quien tuvo tres hijos. Tras ser adquirida la CAM en 2012 por el Banco Sabadell, su Obra Social siguió en solitario como Fundación Mediterráneo, siendo también coordinador del Centro de Legados en los últimos años, hasta su prejubilación en 2019. Sus restos reposan en un panteón a cuarenta metros del mausoleo de Azorín.