La UE publica el contrato de la vacuna con AstraZeneca, pero oculta precios y plazos
En el tira y afloja con la farmacéutica, la Agencia Europea del Medicamento da luz verde a la comercialización de la vacuna sin restricciones
Comisión Europea anunció ayer que ha decidido conceder la licencia comercial para toda la UE de la vacuna que produce AstraZeneca, apenas unas horas después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) hubiera dado su informe favorable, según anunció en redes sociales la presidenta Ursula von der Leyen en un comunicado en el que decía también esperar «que nos entreguen los 400 millones de dosis como acordamos». Los laboratorios, por su parte anunciaron al mismo tiempo que «en los próximos días» preparan una primera entrega de tres millones de sus vacunas, que es una cifra muy alejada de las expectativas europeas, sobre todo después de la intensa polémica que se ha vivido entre la UE y esta compañía de capital anglo-sueco y que desembocó también ayer en la publicación del contrato comercial que ambos firmaron en agosto y en el que figura claramente que los laboratorios se habían comprometido a poner a disposición de la Comisión cuatro de sus centros de producción, incluyendo los dos que se encuentran en el Reino Unido y que hasta ahora solo han suministrado a las autoridades británicas.
La de AstraZeneca es la tercera vacuna autorizada para combatir el coronavirus en Europa, después de las de Pfizer-BioNTech y la de la norteamericana Moderna. La agencia alemana de control de medicamentos había emitido opiniones que ponían en duda la eficacia de la de AstraZeneca en los mayores de 65 años, pero la EMA solo hace referencia en su evaluación al hecho de que falta información para determinarlo. Lo que sí considera probado es que es segura a partir de los 18 años y que ha demostrado una eficacia del 60% en los ensayos clínicos.
¿Funciona en mayores?
El director del Grupo de Vacunas de Oxford, Andrew Pollard, que ha colaborado con la farmacéutica en la creación de este remedio, aseguró en una comparecencia telemática que su eficacia en mayores de 65 años debería ser «similar» a la que presenta en adultos jóvenes, aunque consideró que las opiniones de las autoridades nacionales «son respetables» y que «obviamente, debemos respetar cualquier decisión de los Estados miembros (de la UE) sobre cómo quieren utilizar la vacuna. Ellos pueden tener sus propios comités científicos y tomar sus propias decisiones, basadas en el mejor interés para su población».
Aunque el polémico contrato publicado ayer por la Comisión estaba con la mayor parte de su contenido borrado, en realidad durante un tiempo fue posible desvelar las tachaduras de modo que se sabe por ejemplo que el precio total es de 870 millones de euros, para cubrir todos los costes y gastos directos e indirectos incurridos por AstraZeneca en la producción y distribución de los 400 millones de dosis de su vacuna, de modo que en caso de que esos costes aumentasen la Comisión debería asumirlos si están debidamente justificados. Es decir que la compañía está cubierta en términos de posibles pérdidas. Se considera que la gran parte de lo que ha sido ocultado en el contrato lo era a petición de la compañía. Sin embargo, lo que la Comisión quería lograr al publicar el contrato era demostrar que AstraZeneca se había comprometido a suministrarle vacunas desde cuatro de sus factorías, incluyendo las dos que están en el Reino Unido, en contra de lo que decían los laboratorios, que afirmaba que eso solo dependía de su buena voluntad. La Comisión atacó a