Olivia Newton-John rechaza vacunarse contra el Covid-19
En 1992, la cantante y actriz Olivia Newton-John, de 72 años, fue diagnosticada de cáncer de mama. Desde entonces y hasta la fecha, ha sido diagnosticada dos veces más del mismo mal, en 2012 y en 2017. En el último dictamen médico, se añadió un tumor en la base de la columna vertebral. En la actualidad su cáncer de mama se encuentra en estadio 4, según «The Daily Mail». Este repaso del historial médico de la inolvidable Sandy de «Grease» viene a propósito de la insólita confesión
Opina su hija «Estoy en contra de poner mercurio y pesticidas en mi cuerpo, que es lo que hay en muchas vacunas», dice
que ha realizado en una entrevista a dúo con su hija, Chloe Lattanzi (34), a «The Herald Sun», en la que manifiesta su intención de no vacunarse contra el Covid-19. En el Reino Unido y EE.UU., son varias las celebrities que ya se han puesto la primera dosis, como Joan Collins, Harrison Ford o Arnold Schwarzenegger.
Olivia Newton-John, sin embargo, no ha dado demasiadas explicaciones sobre su negativa a inmunizarse: «En este momento, no lo voy a hacer». Su única hija, Chloe, ha sido quien ha tomado la palabra.
«No soy antivacunas, lo que pasa es que estoy en contra de poner mercurio y pesticidas en mi cuerpo, que se encuentran en muchas vacunas», ha dicho Lattanzi. Añade que «para mí, la medicina real es la que proviene de la tierra. La gente confía en las vacunas porque el médico dice que son seguras. Si hubiera tenido la oportunidad de tomar hierbas y plantas cuando era bebé en lugar de que me inyectaran toxinas, lo habría hecho».
Lattanzi dirige una granja de cannabis medicinal en Oregón (EE.UU.) junto a su novio, James Driskill. Bisnieta por vía ma
terna de un Premio Nobel de Física
(Max Born, en 1954), reconoce haberse sometido a dos aumentos de pecho, además de ciertas intervenciones para poner y quitar rellenos en los labios y la cara. Y aunque carece de formación científica, sí se ha permitido lanzar peroratas desde sus redes sociales no solo en defensa de la medicina natural –«salvó la vida a mi madre»–, sino también en contra de algunas recomendaciones de las autoridades sanitarias, como llevar mascarilla. Se siente una rara
avis que nada contra la corriente mayoritaria: «La medicina natural es la fiesta a la que pertenezco. ¿Qué haces cuando eres vegana, cultivas cannabis, defiendes los derechos LGBTQ, eres budista y no estás de acuerdo con las vacunas? ¿Alguien querría relacionarse?», se pregunta.