Delgado, Garzón, Florentino, el caso Tándem y el Covid
La fiscal general del Estado, Dolores Delgado; el exjuez de la Audiencia Nacional, Baltasar Garzón; el presidente del Real Madrid y de ACS, Florentino Pérez, y el directivo y periodista de LaSexta Antonio García-Ferreras compartieron mesa en un restaurante de Madrid el viernes y no pasó desapercibido.
La reunión volvió ayer al foco con la confirmación de que Pérez ha contraído coronavirus. No obstante, en la
Fiscalía General del Estado informaron a ABC que «se ha comprobado» que Delgado «no está en ningún supuesto de riesgo de contagio». Según fuentes del entorno de los comensales, el empresario tenía una PCR y una prueba de antígenos negativas recién hechas. Ella además, pasó el Covid en noviembre. Garzón, en marzo.
Esas fuentes describen la reunión como una comida entre amigos que se venía posponiendo. Es conocida la relación entre Garzón y Delgado así como la amistad entre Pérez y García Ferreras, que fue director de Comunicación del Real Madrid. Garzón, además, colabora esporádicamente en su programa. Aseguran las mismas fuentes que se trataron por ello asuntos personales y de actualidad, nada profesional.
Sin embargo, a nadie se le escapa que esa reunión se parece a la escenificación de las partes de un proceso penal. Acusación, defensa, perjudicado y a falta de juez, un periodista.
Florentino Pérez consta como víctima en la causa en la Audiencia Nacional que investiga al comisario jubilado José Manuel Villarejo. En concreto, figura en la pieza separada relativa a los servicios que el policía habría prestado para Iberdrola y su condición de perjudicado fue ratificada en enero. Es la misma causa en la que Ilocad, el despacho de abogados de Garzón, representa a tres investigados: los comisarios retirados Carlos Salamanca y Enrique García Castaño y el anterior director Adjunto Operativo de la Policía Eugenio Pino, relacionados, de un modo u otro, con Villarejo. Pese a que el exmagistrado no ejerce personalmente la defensa de ninguno y que hasta la fecha, no están involucrados en el asunto sobre Iberdrola, la sombra del caso Tándem es alargada. Planea sobre Delgado, grabada en una comida con el comisario, desde el día que fue nombrada fiscal general. Tiene ascendencia sobre todos los fiscales, incluidos los que llevan ese caso.
A la salida del restaurante, el Telégrafo, una marisquería situada a espaldas de la Castellana, el conductor de Pérez llevaba bajo el brazo un ejemplar del último libro de Baltasar Garzón, «La encrucijada». La misma que, vista desde fuera, pudiera parecer aquella mesa.
El positivo del presidente del Real Madrid pone otra vez el foco sobre una comida con relevantes comensales