Eguibar: «En la meta no podía ni caminar»
El ‘rider’ donostiarra se ha convertido en el primer campeón del mundo español en esta dura modalidad
De camino a su siguiente parada del curso, en Austria, Lucas Eguibar atiende a ABC. A su lado en el coche, su fisioterapeuta Mati Szulz. Muy bien le vinieron el jueves sus manos para desentumecer el cuerpo después de atrapar un oro mundial en Suecia, en una carrera trepidante que incluyó fotofinish. «Al pasar la meta no es que no sintiera las piernas,es que no estaban las piernas, no había. No podía ni caminar», reía. Así de concentrado estuvo en la final y de tensa es una prueba de snowboard cross. «Esto no es un partido de fútbol que tienes 90 minutos y puedes ir cambiando mucho de ideas. Aquí nos lo jugamos todo en un minuto en el que puede pasar cualquier cosa. Sí que tienes una estrategia antes de salir, pero te tienes que adaptar cada segundo. Puedes esperar salir de los primeros y que luego pase lo contrario. Estás a lo que ocurre», explica. Pero en la carrera del jueves, todo fue perfecto. «La final ocurrió según lo tenía planeado. A veces sí que puedo disfrutar, pero ayer no podía estar centrado en eso, sino en hacer lo que tenía en la cabeza porque nos jugábamos mucho».
Se jugaba él y todo el esquí español, que vive desde hace tiempo con las alegrías de Eguibar o de Regino Hernández. «Sí que hay una evolución desde aquella primera medalla en 2015. Hemos tenido portadas en algunos medios importantes y eso hace años no lo hubiéramos imaginado». También el propio Eguibar, claro, ha evolucionado. Tenía 20 años con aquel primer triunfo y este pasado martes cumplió 27. «Incluso en esta final cometí errores. Lo que he mejorado son los años: más experiencia, madurez, y otras cosas más técnicas. Todo eso me ayudó en la final, en la que había que ser rápido e inteligente. A los rivales los conoces de sobra, pero por mucho que los conozcas esto cambia en un segundo, como he dicho».
Ayer se tomó el día de viaje para saborear todo lo que salió perfecto. Porque también ha sido un año muy difícil para el deportista y para su deporte
Lucas Eguibar en general. «Es que fue muchísima alegría. Se me acumularon un montón de sentimientos. Hemos pasado muchos meses encerrados. Hemos visto cómo cancelaban el campeonato de China, cómo programaban carreras y luego las anulaban, que no había garantías de celebrarse... Y venir aquí y haberlo conseguido, bua, todavía estamos flipando». Un oro mundial logrado, además, en un circuito al que no estaba acostumbrado. «Reubicaron el campeonato del mundo por el coronavirus. Y nos tocó aquí en Suecia en un circuito donde compiten en esquí cross cada año, pero para nosotros era la primera vez. Era un circuito muy exigente, pero es una pasada. Me encantó y volvería cada año», asegura.
Paso a paso hacia Pekín
Sobre todo si es a ganar un oro con el que sumar confianza y más lecciones hacia los Juegos Olímpicos de Pekín 2022. En Pyeongchang 2018 no tuvo la mejor de las suertes. «Después de lo que ha pasado este año con el coronavirus, queda un mundo para los Juegos. Sí he soñado con la carrera de 2018, pero no es una espina. El deporte, como la vida, a veces es injusto. Si me caí es que había un motivo, algo hice mal. Pero todo eso me hace aprender y crecer».
Evolución «Hemos tenido alguna portada en los medios y eso hace años no nos lo hubiéramos imaginado»