El Supremo le niega a Trump el blindaje de sus impuestos
El expresidente ha rechazado darle las declaraciones de la renta al fiscal
Donald Trump ha perdido la primera batalla judicial de su pospresidencia y una Corte Suprema que él nombró en un tercio se ha negado a blindar sus declaraciones de la renta, que ahora quedan en manos de un fiscal de Nueva
York que investiga sus finanzas. Durante años, Trump se ha negado a hacer públicas sus declaraciones, alegando que están sujetas a una auditoría. Es el primer presidente contemporáneo que se niega a hacerlo.
El Supremo recibió las últimas pruebas del caso el 19 de octubre, pero prefirió esperar con prudencia a emitir un veredicto, se entiende que para no interferir en el proceso electoral. Ahora, los magistrados le dan al fiscal demócrata de Nueva York Cyrus Vance la información más preciada del expresidente: una estimación de sus ingresos y sus deudas, algo que ha sido un misterio durante años. El veredicto se ha emitido de forma unánime y sin un razonamiento, algo que suele suceder cuando los nueve jueces tienen muy claro un asunto y no ven necesidad de dar mayores explicaciones. Es cierto que en principio el fiscal neoyorquino debe mantener las declaraciones en secreto, pero ya ha habido filtraciones muy sonadas en este caso que han incendiado a Trump y sus abogados.
Antes de las elecciones, el diario ‘The New York Times’ reveló que durante 10 años a Trump la declaración de la renta no le salió a pagar y que en 2016 y 2017 debió abonar apenas 750 dólares después de las retenciones. Las declaraciones de la renta no suponen una estimación de patrimonio, pero esa filtración demostró que Trump es un hombre muy endeudado. En tres años debe satisfacer un crédito de 421 millones de dólares (346 millones de euros). Y el plazo para el pago de una hipoteca de 100 millones sobre su rascacielos en la Quinta Avenida de Manhattan vence en 2022.
Unánime Los nueve jueces de la Corte Suprema han fallado a favor de que la Fiscalía siga investigando
La Fiscalía de Nueva York instruye el caso que ha llegado al Supremo sobre el pago de 130.000 dólares a la actriz pornográfica Stormy Daniels y otros 150.000 dólares a la modelo Karen McDougal para que ambas mantuvieran en secreto sus relaciones con Trump cuando este ya estaba casado con su actual mujer, Melania. Ambos pagos ocurrieron en 2016, durante campaña electoral, y ni Trump ni Cohen los declararon, por lo que la fiscalía neoyorquina considera probado que defraudaron al fisco.
Desde Richard Nixon todos los candidatos, menos Trump, han hecho públicas sus declaraciones de impuestos. Trump se ha limitado a lo que manda la ley: una estimación de patrimonio. En la de 2019, que presentó hace apenas dos meses, el presidente informó a su empleador, el Gobierno federal, que en ese ejercicio fiscal ingresó 446 millones de dólares. No se conoce, empero, su fortuna total.