El barco vikingo más grande de la historia
La lancha de desembarco vikinga más grande de la historia, el barco conocido como Roskilde 6, se monta en el Museo Nacional de Copenhague. Los técnicos reconstruyen sobre la estructura metálica las maderas originales con las que los mejores navegantes del siglo XI botaron la insignia de una flota con la que atemorizaban las costas de Gran Bretaña y el norte de Europa.
El Roskilde 6 mide 37,4 metros de eslora, apareció bajo tierra en la antigua línea de costa del fiordo del mismo nombre, cuando se construía el puerto del Museo de Barcos Vikingos. Las investigaciones mostraron que fue hundido deliberadamente junto a otras naves para bloquear el paso en un tiempo de luchas e incursiones. El pecio fue liberado del fango y excavado con
La quilla es la clave de este pecio que se expondrá desde junio en Copenhaggue
todas las garantías científicas. Se pudo salvar así la quilla en toda la longitud de la eslora del barco original, así como la tablazón en su parte central. De los centenares de fragmentos rescatados, los arqueólogos pudieron aprender cómo se fueron perfeccionando las técnicas de construcción naval de los vikingos en la era tardía, cuando empezaron a botar cada vez barcos más grandes. De hecho este ejemplar era más de diez metros más largo que las carabelas de Colón, construidas cuatro siglos después.
El Roskilde 6 ha estado de gira mundial durante los últimos años, incluido el Museo Británico, donde fue la estrella de una gran exposición sobre los vikingos en la que se divulgaron los últimos descubrimientos relativos a este pueblo con fama de guerrero pero que construyó una red comercial por todo el norte de Europa. No obstante, la llegada de lanchas de desembarco como el Roskilde, con cien guerreros sobre su cubierta, debieron hacer palidecer a los más veteranos soldados de la Edad Media.