Sanidad estudia el cierre del interior de bares y restaurantes
Las comunidades deberán dar el visto bueno a las nuevas recomendaciones
La amenaza cada vez más real de una cuarta ola obligó ayer a la Comisión de Sanidad Pública a revisar el plan de ‘Actuaciones de Respuesta Coordinada para el Control de la Transmisión del Covid-19’ con el objetivo de endurecer algunas de sus medidas. En el documento, al que ha tenido acceso ABC y que este comité técnico estudiaba ayer al cierre de esta edición, propone, entre otras cosas, cerrar el interior de los bares y restaurantes cuando la incidencia acumulada de la región esté por encima de los 150 casos por cada 100.000 habitantes.
Varias comunidades llevan varios días en ese nivel de riesgo medio. Es el caso de Asturias, Cataluña, Ceuta, Madrid, Melilla, Navarra y País Vasco. La incidencia media del virus en España subió ayer hasta los 134,08 positivos por cada 100.000 habitantes, según los datos publicados por Sanidad.
La comisión se basa para hacer esta nueva recomendación en los últimos artículos científicos que prueban que «la reapertura de restaurantes produciría el mayor número de infecciones adicionales (comparado con mantenerlos cerrados), seguidos de los gimnasios, hoteles y lugares de culto». La causa de esta mayor transmisión no
El Consejo Asesor del Plan de Protección Civil del País Vasco, Labi, presidido por el lendakari Íñigo Urkullu debatirá hoy la posibilidad de establecer confinamientos perimetrales municipales y de sus territorios históricos si superan los 400 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Además, en los lugares en que exista esta tasa, se plantea limitar el horario en el interior de la es otra que «la exposición prolongada a las secreciones respiratorias que se emiten en forma de aerosoles y que contienen el virus». El documento –que propone una serie de medidas de acuerdo al nivel de incremento de los contagios– concluye que «la transmisión del SARS CoV-2 se ve favorecida en lugares cerrados, mal ventilados, con afluencia de muchas personas y hostelería desde las 6.30 a las 9.30h, y de 13.00 a 16.30h. El documento que está sobre la mesa propone la modificación del decreto con las medidas actualmente en vigor. Estas nuevas restricciones afectarían sólo a municipios de más de 5.000 habitantes con una tasa de incidencia acumulada igual o superior a 400 contagios por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días y a las localidades de menos de 5.000 habitantes en los que la donde no se observen las medidas de distanciamiento e higiene».
De aprobarse, las nuevas restricciones afectarán también a las terrazas de los establecimientos hosteleros, ya que solo se podrá admitir a clientes en el exterior de los bares y restaurantes con aforo limitado cuando la incidencia acumulada no supere los 500 casos por cada 100.000 habitantes. Con una tasa superior, solo será posible el servicio a domicilio. En cuanto a los locales comerciales y mercadillos, el documento que estudiaba ayer la Comisión de Salud Pública contempla límites a su horario cuando la incidencia acumulada sea mayor a 250 y el cierre de todos aquellos no esenciales cuando se sitúa en más de 500 casos por cada 100.000 habitantes.
No de obligado cumplimiento
Sobre las reuniones sociales recoge que, con una incidencia superior a los 250 casos por cada 100.000 habitantes, todas deberán ser de un máximo de cuatro personas, excepto para los grupos de convivencia estable.
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, explicó el miércoles en una rueda de prensa tras el Consejo Interterritorial de Salud, que el plan de ‘Actuaciones de Respuesta Coordinada’ fue «aprobado en octubre del año pasado» y que las propias «comunidades autónomas habían pedido que se actualizara». La ministra recalcó que se trata de «un marco de actuaciones a recomendar» y no de obligado cumplimiento. En caso de que la Comisión de Salud Pública dé el visto bueno a estas restricciones, deberían ser ratificadas por el Consejo Interterritorial de Salud para aprobarse, momento que no llegará, en principio, hasta después de Semana Santa.