Rechazo a darle crédito
tras considerar que la aerolínea no era «fiable ni viable», según relatan fuentes financieras a este diario. De hecho, los mismos informantes apuntan a que el propio ICO podría haber desaconsejado la concesión de este préstamo, tras analizar la operación y considerar que había riesgo de que Plus Ultra no tuviera capacidad para devolver el montante prestado.
La misma aerolínea reconoce en sus últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil la negativa de la banca a concederle este préstamo, razón con la que fundamentan su necesidad de entrar en el fondo para empresas estratégicas de la SEPI. En este sentido, en el mismo documento justifican que el rechazo de la banca al sector fue generalizado, a pesar de que otras compañías como Iberia, Vueling o la también rescatada Air Europa sí que pudieron acceder a financiarse de forma privada avalados por el ICO.
A 31 de enero de 2020, Plus Ultra tenía unos números rojos de 2.780.000 euros y arrastraba más de diez millones de pérdidas de anteriores ejercicios. Tenía un fondo de maniobra negativo de 5.753.638 euros y un patrimonio neto de 5.841.512,99 euros. Un saldo con el cual, según la auditora, estaría en causa de disolución de no ser por un préstamo participativo de 6.304.314 euros que computa como patrimonio. Dicho crédito llegó desde una entidad de Panamá, meses después de la entrada de la venezolana Snip Aviation al capital de la compañía. Una empresa con dirigentes vinculados al Gobierno de Maduro.