Deliveroo sale hoy a Bolsa con un precio más bajo del previsto
▶ Los inversores aumentan sus dudas con el modelo laboral de la plataforma
La inestabilidad del mercado en el sector tecnológico, sobre todo en Estados Unidos y Reino Unido, y las dudas de algunos inversores sobre el modelo laboral de Deliveroo, han provocado que la empresa británica vaya a salir este miércoles a Bolsa con un precio menor al previsto. Aunque la pandemia ha supuesto un varapalo para muchísimos negocios, hay empresas, como Deliveroo, que se han visto beneficiadas con las restricciones. En su caso, el hecho de que los restaurantes en Reino Unido lleven semanas cerrados, debido al tercer confinamiento en un año, pero con permiso para ofrecer comida a domicilio, ha permitido mantener a flote muchas empresas de restauración y a la vez democratizar el uso de esta plataforma por parte de los usuarios, confinados en sus hogares.
En un comunicado, la compañía, fundada en 2013, explicó que aunque esperaba que su valor fuera de hasta 8.800 millones de libras, finalmente oscilará entre los 7.600 y los 7.850 millones de libras, con un rango de precios de entre 3,90 y 4,10 libras esterlinas por acción, y no entre las 3,90 y 4,60 libras previstas inicialmente. Un portavoz indicó que «Deliveroo ha recibido una gran demanda de instituciones de todo el mundo y la operación quedará cubierta varias veces con este rango de precios» y detalló que la operación está «liderada por tres inversores clave muy relevantes». Además, «dada la volatilidad de las condiciones del mercado global para las OPV, Deliveroo está eligiendo un precio responsable dentro del rango inicial y en un punto de entrada que maximiza el valor a largo plazo para nuestros nuevos inversores institucionales y minoristas».
A pesar de que podría convertirse en la mayor salida a Bolsa en Reino Unido en la última década, un impulso necesario para la City londinense tras ser desbancada por Ámsterdam como la principal bolsa europea, lo cierto es que algunos inversores han expresado sus preocupaciones sobre el modelo de la empresa, que pone en la mira los derechos de los trabajadores tal y como sucedió recientemente con Uber, así como las dudas sobre su regulación.
Los ciclistas de Deliveroo, unos 100.000 en 800 ciudades del mundo, son trabajadores autónomos que ganan por comisión, lo que significa que no tienen un salario mínimo pagado por la empresa ni derecho a vacaciones pagadas o a bajas por enfermedad. Si, como sucedió con Uber, se produjera un cambio en la legislación en este sentido, eso supondría un riesgo para los inversores, algo que podría suceder si prospera la demanda en su contra del Sindicato de Trabajadores Independientes, que asevera que algunos repartidores en el norte de Inglaterra están ganando salarios tan bajos como de dos libras la hora.
Cae mil millones Deliveroo confiaba llegar a los 8.800 millones de libras de valor; este al final será de hasta 7.850 millones